Un sargento cambia el tricornio por la montera y sube al estrado. Coge estoque y muleta y comienza a dar una clase magistral sobre tauromaquia. Ante los 250 alumnos de un curso de ascenso a suboficial, el guardia explica conceptos básicos sobre el toreo y da una lección detallada de cómo entrar a matar. Muchos aplauden, pero a otros la demostración les parece innecesaria y graban vídeos para mostrar su rechazo.

La clase ha sido criticada por la propia Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC), la mayor agrupación organizada de agentes dentro del cuerpo, a través de su cuenta en la red social Twitter. “Así aprovecha el tiempo en los planes de estudio la Dirección General de la Guardia Civil. Enseñando a torear”, puede leerse en un mensaje publicado en dicho medio.

Fuentes oficiales de la Guardia Civil explican que solo se trató de un momento distendido. Los guardias civiles pueden ejercer de delegados gubernativos en las corridas de toros, por eso conocer la ley de espectáculos taurinos es parte de su formación, defienden.

No es la primera vez que la AUGC denuncia el derroche de medios en acciones innecesarias y la falta de inversión en otros aspectos primordiales. Sucedió recientemente cuando se hizo viral un vídeo tomado en Lourdes, en el que se podía ver una conga formada por Guardias Civiles, monjas y gendarmes galos, que bailaban animadamente al ritmo de un ‘Que viva España’ tocado in situ por una orquesta. Los agentes fueron al santuario situado en esta población francesa con motivo de una peregrinación primaveral.