El Consejo de Administración de LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA ha decidido nombrar gerente del periódico a Carlos Miguel Zardaín Arias, economista con larga y brillante trayectoria en Prensa Ibérica Media (PIME), grupo al que pertenece LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA. Con este nombramiento se pretende dar un nuevo impulso a los departamentos comerciales y de gestión del diario y afrontar los retos de futuro del sector.

Carlos Miguel Zardaín Arias, de 53 años, casado, con dos hijos, diplomado en Ciencias Empresariales y licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales con estudios de posgrado de auditoría financiera, desarrolló la práctica totalidad de su carrera profesional en Prensa Ibérica, grupo al que llegó tras un breve periodo de formación práctica en la antigua empresa siderúrgica Ensidesa.

En 1992 se incorporó al departamento de contabilidad de LA NUEVA ESPAÑA, el periódico de Prensa Ibérica en Asturias. En 2005 fue nombrado director financiero de Editorial Prensa Asturiana, editora del rotativo del Principado. En 2009 se trasladó a Canarias como director financiero de las empresas del grupo en el archipiélago: Editorial Prensa Canaria, editora del periódico «La Provincia», «La Opinión de Tenerife» y Artes Gráficas del Atlántico. Desde el pasado mes de mayo venía ejerciendo como director de control de gestión de Prensa Ibérica.

Carlos Miguel Zardaín releva como gerente de LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA a Manuel Conde Cifuentes, quien ha permanecido 26 años en el cargo, los mismos que lleva editándose la cabecera, cuya salida al mercado capitaneó e impulsó de manera decisiva hasta convertir el

periódico en líder de audiencia de cuantos se han editado en la provincia y referente informativo indiscutible de todos los zamoranos. Los 48.500 lectores diarios de su edición impresa, según la última oleada del Estudio General de Medios (EGM), y los 617.343 usuarios únicos mensuales de su web según Comscore (4.442.637 páginas vistas mensuales) evidencian el éxito de LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA y la excepcional fidelidad que los zamoranos le profesan.