La Junta Provincial de Seguridad presentó ayer el plan contra el terrorismo yihadista, que contiene las medidas para prevenir y actuar ante un posible atentado en la provincia de Zamora, con aspectos desde la colocación de barreras fijas o móviles en lugares de gran concurrencia, al establecimiento de un plan para responder a una acción que se pueda producir en el territorio. Un documento que se estrena precisamente en la Semana Santa de 2018, la primera cita con gran aglomeración de gente en la provincia, aunque no es exclusivo de esta celebración y servirá para todo tipo de acontecimientos multitudinarios.

El documento nace a raíz de las medidas puestas en marcha derivadas del nivel 4 de alerta antiterrorista establecido por el Gobierno en 2017, y sobre todo a raíz de los atentados de Barcelona y Cambrils. En la reunión participaron los ayuntamientos de Zamora, Benavente y Toro, a través de sus respectivos responsables de Policía, además de los jefes directos de la Policía Nacional y de la Guardia Civil.

El subdelegado del Gobierno, Jerónimo García Bermejo, explicó que el presentado ayer es "un documento completísimo por el análisis de los riesgos y el establecimiento de las alternativas, tanto preventivas como reactivas a las situaciones". Uno de los objetivos del trabajo era el de "localizar y definir los puntos de máxima concentración y afluencia de personas y de público así como las fechas en las que se producía", además de contemplar "aquellos lugares de acceso de vehículos que pudieran tomarse en estos puntos de máxima confluencia", para poder instalar barreras fijas o móviles, según las características de cada lugar.

García Bermejo agradeció las aportaciones al documento realizadas por las policías locales, sobre todo en los aspectos más cercanos a sus respectivos territorios de actuación.