Los zamoranos volvieron a demostrar anoche la devoción que la ciudad profesa por la Virgen de la Soledad, entronizada en la iglesia de San Juan para la ocasión. El párroco, Narciso Lorenzo, fue el encargado de oficiar la misa en el templo. El ceremonial se prolongará hasta el próximo sábado dentro de los días de preparación para la Semana Santa.