«Se nos va el último de tres magníficos. El último del "triunvirato"», las tres personas que todo el mundo destaca como los auténticos impulsores de la Semana Santa zamorana en el siglo XX: Dionisio Alba Marcos, que fallecía ayer a los 97 años de edad, Marcelino Pertejo y Ricardo Gómez Sandoval. Era -dicen los que le conocieron- una persona entregada, con especial sensibilidad para todo lo que tuviera que ver con la Semana Santa e incluso con un gusto estético fuera de lo común. Alba Marcos recibirá hoy el último adiós de todos los que le conocieron, admiraron y quisieron (iglesia de San Lorenzo, 17.00 horas).

La actual presidenta de la Junta pro Semana Santa, Isabel García Álvarez, lo define como «la historia de la Semana Santa» y destaca sobre todo «su gran dedicación, su amor por la Semana Santa. Para mí es un referente». Fundador de La Borriquita, Las Capas y el Yacente, tres de las cofradías señeras en la Pasión zamorana, «fue un claro exponente de la Semana Santa y formará parte de su historia».

Su antecesor en el cargo, Antonio Martín Alén, fue el encargado de llevar al velatorio la pendonilla de Las Capas como presidente. «Es una pérdida irreparable para la cofradía. Era una persona con mucho gusto, mucho tacto y fundador de cofradías emblemáticas», afirmaba ayer. Fernando Primo, por su parte, afirma que «se ha muerto el último referente del siglo XX de la Semana Santa, junto con Marcelino Pertejo y Ricardo «Pintas» (Gómez Sandoval). Nos ayudó muchísimo en la fundación de las Siete Palabras , con mucho entusiasmo». Como persona «era de una generación anterior, muy estricto y de gran valía. Hoy en día se le tiene que reconocer todo lo que hizo, entre otras cosas fundar Las Capas, descubrir el Yacente, crear esa procesión tan impresionante, y Jesús en su Entrada Triunfal en Jerusalén. Se le debe reconocer haber dado toda su vida por la Semana Santa y el testamento que deja con sus hijos, que son parte fundamental de la Semana Santa, dos generaciones: Dionisio Alba Álvarez, presidente del Yacente y Ramón Alba, expresidente de La Borriquita».

El presidente de La Buena Muerte, Félix Gómez, reconocía también que «para mí era una persona entrañable, muy querida, cuya labor ha sido fundamental para conservar nuestra Pasión». Gómez elogió igualmente su tarea en la «transición» de una celebración que estuvo contra las cuerdas y ensalzó el «legado» que Alba Marcos deja tras de sí después de una vida dedicada a la Semana Santa.