El concejal de Seguridad Ciudadana, Antidio Fagúndez, hizo ayer un "llamamiento a la tranquilidad" después de que, al término de la Junta Local de Seguridad, el subdelegado del Gobierno asegurara que Zamora estará en Semana Santa en alta alerta terrorista. "Es posible que del mensaje de la semana pasada surgiera cierta sensación de inquietud" en la ciudadanía, aseguró Fagúndez, pero "el riesgo es el mismo que en toda España y Zamora es una ciudad tranquila. Hacemos un llamamiento a los turistas, para que vengan y disfruten de nuestra gastronomía, nuestros hoteles y nuestra Semana Santa".

El primer teniente de alcalde hizo estas declaraciones después de detallar, acompañado por el jefe de la Policía Municipal -Tomás Antón- y de la presidenta de la Junta pro Semana Santa -Isabel García-, los pormenores del dispositivo municipal de cara a los próximos días, en los que Zamora multiplica su población por la llegada de turistas.

El dispositivo estará compuesto por unas 400 personas repartidas en varios servicios, como obras, limpieza de parques y jardines, bomberos, Protección Civil y Policía Municipal. Por lo que refiere a la organización de algunos desfiles, hay cambios importantes concentrados en las salidas de la Tercera Caída y de La Soledad. Así, el Lunes Santo por la tarde se cortará al tráfico la Cuesta de la Morana hasta la carretera de la Hiniesta para que los hermanos de la Tercera Caída formen la procesión en la zona "y no se registren las aglomeraciones de los últimos años detrás de la iglesia" de San Lázaro. El Sábado Santo se hará una maniobra similar, pero en la calle Reina y plaza de La Leña, donde las hermanas de La Soledad formarán para que no haya más aglomeración de personas en la Plaza Mayor.

Por lo que refiere a limpieza, se ha reforzado el servicio con diez personas hasta un total de 95 trabajadores. El Ayuntamiento repartirá 100.000 "pipeleras" para mantener limpias las calles y se instalarán 40 baños portátiles repartidos en plaza de la Catedral, Museo de Semana Santa, Plaza Mayor, Viriato y San Martín. El año pasado, recordó Fagúndez haciendo una llamada al civismo, estos urinarios fueron usados unas 38.000 veces.

Como el año pasado, se instalará un puesto de Cruz Roja en San Martín y se ha trabajado en recorridos alternativos de los Bomberos por si hubiera cualquier emergencia durante las procesiones. La plantilla de la Policía Municipal estará disponible al cien por cien durante los próximos días para organizar el tráfico, retirar vehículos de las zonas donde no se pueda aparcar o resolver cualquier incidencia.