El Cristo Yacente saldrá por primera vez este año de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de Villaralbo, al igual que el resto de los pasos que desfilan el Jueves Santo con la cofradía de Jesús Nazareno. La intermediación del párroco Antonio Jesús Martín de Lera entre los representantes de la cofradía y la junta parroquial ha facilitado acabar con el destierro del Cristo, que lleva tres años almacenado en un domicilio particular desde donde el pasado año se incorporó a la procesión.

El Cristo, que ya tiene permitido el acceso al templo, será acondicionado junto al resto de pasos el jueves por la mañana para salir en procesión al igual que el resto de las tallas que saldrán en la procesión de Jesús Nazareno a partir de las ocho y media de la tarde. Después de la procesión la imagen del Yacente también se podrá meter en la iglesia al donde permanecerá hasta el sábado, cuando se desmonten los pasos.

Fue a finales del año 2013 cuando la Asociación Cultural Banda de Cornetas y Tambores adquirió un Cristo Yacente. Durante el encuentro de cofradías que se celebró en Medina del Campo la Banda de Villaralbo cerró el trato por la compra de una escultura que tuvo un coste de 2.400 euros que se consiguieron mediante la realización de diferentes actividades. La imagen, de unas dimensiones de 1,85 metros de largo y 85 kilos de peso, procedía de la Cofradía Unción y Mortaja de Tenerife y su autor es el sevillano Francisco Fariñas Romero.

Tras la adquisición, la Asociación Cultural de la Banda de Cornetas y Tambores lo cedió a la Cofradía de Jesús Nazareno, fue bendecida por el párroco de Villaralbo, pero la junta parroquial se negó a que entrara en el templo con las otras imágenes de la Pasión de la localidad, como el Nazareno, el Cristo de la Agonía, Nuestra Madre de las Angustias, o el Resucitado entre otros.

El año pasado, la cofradía de Jesús Nazareno decidió que poco antes de la procesión del Jueves Santo, los hermanos se concentraran a las puertas del domicilio particular donde se encuentra el Cristo para ser trasladado de manera oficial con el estandarte de la hermandad hasta las puertas del templo de Nuestra Señora de la Asunción e incorporarse al desfile procesional. Con la solución adoptada este año parece que el Cristo por fin podrá entrar en la iglesia, poniendo así fin a la extraña situación que se producía con la talla saliendo desde un domicilio particular.