La procesión de la Virgen de los Dolores abrió anoche los actos centrales de la Semana Santa de Fuentesaúco. A diferencia de otros lugares, la lluvia respetó en esta localidad y los cofrades y devotos pudieron hacer el recorrido desde la iglesia de San Juan hasta la Plaza Mayor con vuelta de nuevo al templo, acompañando a la imagen de la Virgen de los Dolores, una talla de Juan de Montejo de fines del siglo XVI.
Los más de sesenta cofrades, en su gran mayoría mujeres aunque también hay algún varón, vistieron sus túnicas negras en la ermita de los Dolores, para partir desde allí hasta la iglesia de San Juan donde tuvo lugar la misa. Al término de la eucaristía comenzó la procesión con el ejercicio de los Siete Dolores de la Virgen en un ambiente de recogimiento y devoción.
Es el tercer año que la imagen sale bajo el amparo de la reconstituida Cofradía de la Virgen de los Dolores, desaparecida a principios del siglo XX aunque nunca dejó de procesionar la imagen, que viste manto de salida en terciopelo negro, bordado en oro, corona con ráfaga de plata y una cruz con remates en plata.
Las celebraciones de la Semana Santa de Fuentesaúco prosiguen hoy con la entrega de ramos y la procesión desde la Plaza de Santa María con la solemne entrada de Jesús en Jerusalén. Esta procesión se caracteriza por el colorido y la vistosidad, enriquecidas con la participación de los niños.
