Bajo el claustro del Hospital de la Piedad, a salvo de la lluvia, más de una treintena de personas asistió anoche a la Ronda Lírico Pastoral, el acto que anticipa la Semana de Pasión benaventana.
"La Ronda Lírico Pasional que nos disponemos a iniciar, viene a ser un año más el anuncio inminente de la pasión benaventana", glosó el coordinador de la Junta Pro Semana Santa, Dionisio Hueso.
"Pretende ser la Ronda, escenario vivo que recorrerá lugares emblemáticos, aproximándonos a la Semana Santa. A través de ellos, nos adentraremos en el sentimiento piadoso y arraigado de Benavente, mediante diversas composiciones literarias que harán que nos acerquemos al pasado cultural y religioso de nuestra ciudad, siendo a su vez homenaje merecido a las cofradías y hermandades cargadas de historia y antiquísimas costumbres", prosiguió mientras comenzaban a proyectarse imágenes de los monumentos más emblemáticos de la ciudad.
Rememorando las rondas nocturnas, "cuyo origen es la comitiva de vigilancia que se formaba para la seguridad y el orden de los lugares amurallados", comenzó el recorrido por los lugares emblemáticos religiosos de Benavente con la el acompañamiento de la Asociación Cultural Amigos de la Capa y la asociación Las Candelas "que contribuyen con su participación para dar realce al acto, portando con solemnidad y elegancia la capa tradicional" y miembros de las diferentes cofradías benaventanas.
Lecturas relativas al Hospital de la Piedad, a la portada sur de la Iglesia de Santa María, y del Corrillo de San Nicolás, como si se tratarán de estaciones, se sucedieron hasta el concierto del coro de la Escuela de Música Duquesa Pimentel, que interpretó Jerusalem, de Jesús Manzano; el Ave Verum de Mozart, el Sanctus de Shubert; el Ave María de Arcadelt; el Requiem Aeternam de Mozart, y Signore delle cime de Giuseppe de Marzi. Para finalizar el acto, que al cierre de esta edición aún continuaba, estaba previsto el canto de la Salve por todos los asistentes.
