Suerte tienen los del PP con lo del infierno, en el que ya ni el Papa parece creer. Si la religión que mayoritariamente dicen profesar, la católica romana, fuese como me la enseñaron a mi de niño, oye, iban a arder como teas el resto de la eternidad. Ji. Obviamente me refiero a los dirigentes, y no tanto a las bases, suponiendo que en el PP haya bases; esto es, afiliados de a pie sin otro afán que trabajar desprendidamente por el proyecto. Ji, ji. Porque mira que roban. Ese mandamiento de la ley de su dios se ve que lo saltaron en la catequesis.

-A ver, Marianito, ¿cuál es el séptimo mandamiento de la ley de Dios?

-Puehhhssss? No ssshhabía que había tantohssss?.

-José María, responde tú.

-¿Cuál era la pregunta?

-El séptimo mandamiento.

-¡España va bien!

-¡No robarás!

Se ve que a ese mandamiento nunca llegaron los dirigentes del PP. Ni al siguiente: No levantarás falso testimonio ni mentirás. De la primera parte los de Podemos somos prueba constante; nos inventa el PP tantos falsos testimonios desde que nacimos que hasta tienen una sección especial dedicada a eso, dependiente de las Cloacas, subespecie Inda y similares. Y lo de "No mentirás", que es la segunda parte del octavo mandamiento, pues como con el séptimo, ni les suena. Lo acaban de decir lo jueces, en su lenguaje enrevesado pero tremendo. Se ha demostrado que en el PP llevan casi veinte años robando a lo bestia y de manera organizada. De ahí las terribles condenas de prisión para la legión de acusados en el primer juicio Gürtel (aun habrá más, no han acabado). En total 351 años de cárcel, repartidos entre 29 condenados. 51 años de prisión para Correa, 33 para Bárcenas (el extesorero que también era senador para redondear sus ingresos: es para lo que sirve el Senado, versión PP), 15 para la esposa de Bárcenas, 37 para el exsecretario de Organización del PP gallego Pablo Crespo, 14 para el exalcalde del PP de Pozuelo y marido de la exministra Ana Mato (también condenada)? Etc, etc.

Y como colofón, condena contra el mismísimo PP, como partido político, por beneficiarse "a título lucrativo" de la inmensa trama de corrupción que se describe a lo largo de la sentencia. El Tribunal certifica también la existencia de una caja B en el PP, de una contabilidad paralela, donde se anotaban las mordida o sobornos, la pasta que tenían que pagar los empresarios a cambio de obtener contratos de obras públicas o servicios. De lo cual se deduce, y también figura en la sentencia, que no pocos dirigentes del PP, empezando por Rajoy, han venido mintiendo como bellacos cuando negaban todo esto que ya son hechos probados. En cualquier país democrático, repetirán ahora los comentaristas (salvo los del PP), se dimite de inmediato tras semejante sentencia. Pero ya conocemos al presidente del Gobierno y a la banda en la que se apoya; tampoco estaban en clase cuando se explicó el significado de dimitir, de honradez y de decencia. Por tanto, me ahorro pedir la dimisión de quien jamás lo presentará. Solo quiero recordar a quiénes tiene aún estómago para apoyar a un partido condenado por corrupto compulsivo, que si de verdad son católicos practicantes, como fingen, van a ir al infierno de cabeza. Han vulnerado de modo sistemático dos mandamientos al menos. Y el papa Francisco, aunque estaba a punto de cerrarlo, ha decidido que siga abierto el infierno, al menos para ellos.

Bueno, vale. Esto último es una "fake news", una noticia inventada, de las que tanto se llevan. Pero piensen en ello cuando los vuelvan a ver, a los de toda esa panda, condenada como tal panda, en la misa dominical, en las procesiones o llevando a los santos en las romerías. Un partido político, solo uno en toda la historia de España, ha sido condenado en un sumario de corrupción. Y, como en las peores pesadillas, está por todas partes y nos rodea. Nunca nos devolverán lo robado. Nunca les devolverán, a tantos de ustedes, lo votado. Y ni siquiera es seguro que podamos echarlos. El "Podemos de derechas" que pedían los bancos, esa organización edificada de la noche a la mañana, sin gente pero con muchísimo dinero, Ciudadanos, seguirá sosteniendo a los mendaces y pringados "Marianos" hasta que tengan a punto el relevo. Quizá ese sea el mayor de los dramas. Se nos han corrompido los engranajes clave del sistema, pero no nos dejan cambiarlos. Quieren echar "tres-en-uno", un poderosos aceite de color naranja, y a ver si la cosa tira otra temporada.

Y se me han quitado las ganas, la verdad, de hacer más jijís.

(*) Escritor, periodista y secretario de Organización de Podemos en Castilla y León