El problema de la despoblación es un tema serio y por ello, mientras otros partidos políticos solo divagan y critican, el Partido Popular se ha puesto manos a la obra para frenar una situación que tiene un calado muy amplio, es estructural, y no solo afecta a nuestro país, ya que la media europea de habitantes de más de 65 años se cifra en 19,25 % mientras que en España alcanza el 19%.

Un reto conjunto al que la Unión Europea debe atender y planificar políticas que comiencen de verdad a frenar la despoblación. No por ello, el Gobierno de España ni el resto de las administraciones regionales y locales deben ponerse de lado. Es una cuestión de todos y en ello se juega el futuro de muchas generaciones venideras. El Partido Popular se está tomando en serio este asunto, y ya ha comenzado a trabajar para lograr un objetivo que de soluciones a un problema que, por ejemplo, nos dice que en España la media de hijos es de 1,55 por familia, una de las más bajas de la UE.

La herramienta que desde el PP queremos utilizar es la elaboración de la Estrategia Nacional Frente al Reto Demográfico. Un plan diseñado para poder conocer de forma seria y responsable a qué nos enfrentamos y qué soluciones podemos ofrecer. Es complejo y difícil pero a un partido como el que lidera Mariano Rajoy que, ha sido capaz de enfrentarse a la peor crisis de la historia y sacar poco a poco a España de la mediocridad y del pozo económico, este tipo de retos no le da miedo. Al contrario, nos motiva y queremos trabajar para frenarlo. No hay ningún país de la UE que hoy garantice el relevo generacional con índices de natalidad sostenibles. Desde el Partido Popular lucharemos en Europa por mantener y elevar la PAC, por los fondos de cohesión y, sobre todo, prioridad de consideración decisiva del factor demográfico y poblacional. Una batalla que el PP va a ganar en Europa como la que ganamos en 2012 y de la que millones de ciudadanos del mundo rural se han beneficiado. Será otra piedra en la construcción de un gran plan para hacer frente a la despoblación. Queremos afrontarla cara a cara y dar soluciones a los españoles y por eso, nos preocupa y planteamos propuestas.

Desde el Gobierno del Partido Popular seguimos apostando por el envejecimiento activo de la población, siendo cada vez más alta la esperanza de vida hasta el punto de ser nuestra nación la segunda de la OCDE con mayor ratio en este sentido de amplitud vital. Como también apostamos por el empleo joven y las políticas de atención a las familias. Hoy las familias numerosas cuentan con ayudas y ventajas fiscales y, dependiendo de los ingresos, mayores descuentos en sus IRPF, medida puesta en marcha por Mariano Rajoy en 2014. Quizás esto no baste para solventar un problema muy amplio y de orden internacional. Por eso estamos comprometidos y no nos cruzamos de brazos. Los demás partidos no proponen, solo dan lecciones desde la barrera, pero la responsabilidad del PP está por encima de estrategias electorales vacías y ventajistas. Como en la Educación o la Sanidad, estamos ante la posibilidad de dejar las siglas al margen y trabajar por los ciudadanos con pactos de Estado serios y rigurosos. Esto solo lo entiende el PP, los demás juegan en otra división y creen tener la verdad absoluta de todo pero a sabiendas de que no son ellos los que deben dar la cara ante los españoles.

Dos terceras partes de la población viven en un tercio del territorio nacional, en 14 de las 52 provincias más del 80 % de los municipios no superan los 1.000 habitantes, muchos tienen censos en torno a 100 habitantes y la población está altamente envejecida. Este caso, por ejemplo, es el de nuestra provincia zamorana. Para ello, soluciones como el ambicioso Plan 300x100, que ningún partido de gobierno distinto al PP puso en marcha y que en los próximos años llevará a todos los núcleos de población de España la banda ancha a 300 megas logrando, con 525 millones de inversión, la transformación digital de la economía -muchos personas podrán vivir en el pueblo equis y trabajar allí gracias a este plan fijando población y dinamismo- cerrando así la histórica brecha digital geográfica. También apostamos por el Plan Estatal de Vivienda 2018-2020 que ofrece por primera vez la restauración de vivienda unifamiliar rural para jóvenes que en municipios menores a 5.000 habitantes rehabiliten su vivienda o adquieran una con ayudas según su renta, favoreciendo a las personas con menos recursos que quieran apostar por vivir en el ámbito rural. Y esto solo es el principio.

Apostamos por frenar la despoblación manteniendo el sistema de pensiones con el anuncio reciente de subir un 3 % las mínimas, las de viudedad y bajar el impuesto de la renta, una medida que afectará a más de 7 millones de pensionistas. Para ello, necesitamos un pacto por las pensiones y que ciertos partidos dejen de poner palos en las ruedas ante estas mejoras que, incluso, mejoran lo reivindicado de elevarlas al son del IPC. Basta ya de demagogia. El que quiera hablar de soluciones a los problemas, que cuente con el Partido Popular, ya tenemos experiencia en ello. El que quiera seguir instalado en la inoperancia, que mire para otras bancadas.

(*) Procuradora del PP por Zamora en las Cortes de Castilla y León