En griego, resurrección se dice "anástasis". Así se llama el lugar concreto donde se venera este hecho en el que se fundamenta la fe cristiana, dentro de la basílica del Santo Sepulcro de Jerusalén. Una capilla con forma octogonal, ya que la tradición de la Iglesia se refiere a la resurrección de Cristo y al domingo como el "octavo día", ya que tiene lugar en el tiempo, pero proyecta fuera del tiempo, hacia la eternidad. También se llama "anástasis" a la forma típicamente oriental de representar la resurrección de Jesús en el arte, expresando el descenso a los infiernos, es decir, la salvación de todos los justos anteriores a la venida de Cristo al mundo. Así, se le puede observar tomando de la mano a un hombre y una mujer a los que saca de sus tumbas respectivas: son Adán y Eva, que representan a la humanidad salvada.