En estos días en los que Gerard Piqué lleva concentrado con la Selección Española de Fútbol, ha dado un giro, si no radical, si bastante pronunciado en sus posturas que, como todo el mundo sabe, son independentistas. Tenía que moderar el lenguaje porque peligraba su puesto en la Selección, por mucho que Julen Lopetegui le ampare bajo su chándal protector, y como todo el mundo vio y escuchó, se sometió, de aparente buen grado, a una entrevista en la que lanzó una parábola muy a su estilo, para explicar el asunto catalán.

Gerard dijo algo así como "España y Cataluña son como el hijo que tienen 18 años y se quiere ir de casa. El padre, España, tiene que sentarse a dialogar, si no quiere que el hijo se vaya". Como no podía ser de otra forma, arrimó el ascua a su sardina. La parábola de Pique tiene otra lectura bien diferente: España y Cataluña son como el hijo de 18 que tontea con las drogas duras y el alcohol y el padre le dice que no va por buen camino, le reprende una y otra vez, sin conseguir que el chico de 18 deje de chutarse en vena toda la mierda (léase mentiras) que se mete para el cuerpo. Como cambia la cosa, ¡eh!

Pero eso es muy difícil hacérselo ver a quien se cree todas las mentiras que el independentismo catalán viene contando dentro y fuera de los colegios, a todos los catalanes y no catalanes que quieren seguir creyendo en ese mentiroso compulsivo que es Puigdemont. Si hasta el diario parisino Le Mond ha alertado de la difusión de imágenes falsas sobre el 1-O. Imágenes manipuladas favorables a las tesis independentistas y en contra lógicamente del Estado español y de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. Y, mientras tanto, Piqué, columpiándose en una entrevista teledirigida en la que como nunca, el catalán dejaba de mostrarse visceral para hacerse más comprensivo y dialogante.

Esta gente es tan incoherente que Piqué no ve problema alguno en jugar con la Selección Española aunque Cataluña se declare independiente. Estoy leyendo ahora mismo esas declaraciones y me parecen el colmo del cinismo. No sé qué pensará el barcelonés cuando se haya enterado de que el Banco de Sabadell ha trasladado su sede social a Alicante. Y que, cuando esto escribo todavía no se ha producido la reunión programada, hay una enorme posibilidad de que CaixaBank traslade su sede a las Baleares. Y no sólo eso, infinidad de empresas, catalanas y no catalanas, menos las de Jaume Roures que ha venido financiando el independentismo gracias a que los tontos españoles seguimos comprando los productos de sus empresas, que son tantos, están recogiendo los muebles por si tienen que salir escopetados para Madrid o donde sea. ¿Qué pensará Piqué?

Mira por donde los responsables de 'Zamora 10' deberían ponerse las pilas, negociar con alguna de esas empresas y traérselas para Zamora, dejándoles incluso el suelo gratis.