Se pilla antes a un mentiroso que a un cojo. Esta sería una frase perfecta para resumir la actitud de Izquierda Unida, tanto en el Ayuntamiento de la capital como en la Diputación Provincial, cuando ha utilizado de manera partidista el suministro de agua con camiones cisterna por parte de la Institución Provincial.

Una actitud irresponsable que ha puesto en peligro el abastecimiento de muchos pueblos de la provincia y que ahora queda al descubierto con el comunicado remitido a los medios de comunicación esta misma semana por la empresa Tralaza, que hasta hace unas semanas prestaba el servicio del transporte de agua potable con camiones cisterna con un contrato menor suscrito con la Diputación hasta la resolución de la adjudicación definitiva de este contrato para los próximos años.

Tralaza viene a confirmar lo que desde la Diputación Provincial hemos venido poniendo de manifiesto. Durante más de 20 años este servicio ha funcionado con normalidad y han bastado solo dos años de gobierno municipal del actual bipartido IU y PSOE para que surgieran problemas que antes no se habían dado.

Ahora, gracias a la citada empresa, se corrobora la verdad, que no es otra que la que desde la Diputación de Zamora hemos defendido desde que surgieron las primeras trabas por parte del equipo de gobierno actual en el Ayuntamiento de Zamora.

No vamos a ahondar más en la cuestión porque el comunicado de Tralaza es lo suficientemente clarificador al respecto. Ahora serán los zamoranos lo que extraigas sus conclusiones.

Lo que si podemos garantizar a los zamoranos que viven en cualquier municipio del medio rural es que la Diputación acudirá en su auxilio para suministrarle agua potable para el consumo humano, con todas las garantías sanitarias al respecto. Así lo hemos hecho y continuaremos haciéndolo, huyendo del uso partidista que sigue haciendo IU del abastecimiento.

Las zancadillas de Izquierda Unida, de Laura Rivera y del resto de sus compañeros de viaje, no han hecho más que incentivarnos para seguir trabajando en defensa de los intereses y las necesidades de los zamoranos que viven en el medio rural.

Se podría decir ahora que "muerto el perro se acabó la rabia", pero seguro que desde Izquierda Unida en lugar de pedir perdón por su actitud y tener altura de miras, seguirán ahondando en una polémica que pone de manifiesto sus continuas mentiras y su utilización partidista y "podemizada" de cualquier asunto que pueda ensuciar la imagen del gobierno provincial en la Diputación.

Por cierto, las insinuaciones y acusaciones de Podemos no merecen ni ser comentadas. Retratan quiénes son y cuál es la maltraída "nueva política".

Podemos concluir con orgullo que la Diputación ha estado a la altura de la circunstancias porque cumple con el abastecimiento de agua con cisternas en la provincia con las garantías sanitarias exigidas, salvada la circunstancia temporal de la renuncia de Tralaza a prorrogar el contrato, postura entendible y respetable a todas luces visto lo visto.

Otros no pueden decir lo mismo y los zamoranos lo saben.

(*) Diputado de Medio Ambiente de la Diputación Provincial de Zamora