E n la subida al monte de Santa Tecla, en el gallego municipio de La Guardia , hay un castro testimonio arqueológico de antiguas civilizaciones, asentado en una zona privilegiada desde la que se domina todo el entorno de la desembocadura Del Río Miño.

El asentamiento pertenece a la cultura castreña galaica y data del siglo II antes de Cristo. Fue declarado monumento histórico artístico y está considerado como Bien de Interés Cultural. Según escritos de Estrabòn, geógrafo de comienzos de la era cristiana, el río Miño en aquellos tiempos era más estrecho y profundo y los habitantes del Castro estaban allí para ejercer controles de la navegación; pasados los tiempos, cuando se redujo la importancia del tráfico marítimo y la administración romana promovió la ocupación de otras zonas del interior, la población del Castro de Santa Tecla fue perdiendo importancia. En todo caso, las magníficas vistas que se dominan desde el Monte Santa Tecla nos han permitido disfrutar de un día muy agradable de excursión.