En los últimos días ha vuelto a la palestra política y mediática nacional la estación del AVE en su trazado hacia Galicia que se va a construir en la localidad sanabresa de Otero de Sanabria.

Especialmente, son sectores del independentismo catalán quienes atacan esta infraestructura, alegando despilfarro, ya que esta pequeña localidad cuenta tan solo con 26 vecinos.

Es obvio el intento de manipulación y la búsqueda de una noticia sensacionalista que se pretende por parte de aquellos que durante décadas se han visto beneficiados por las infraestructuras realizadas por el Estado en su territorio, sin que nadie haya criticado ese hecho y el disfrute que han hecho de las mismas mientras en otras partes del territorio nacional contábamos con infraestructuras a años luz de las que ellos llevan disfrutando desde hace años construidas con el dinero de todos los españoles.

No obstante, estos políticos del espectro independentista deberían reflexionar, y pensar que cualquier español tiene los mismos derechos a tener servicios de calidad e infraestructuras modernas, independientemente de la provincia o comunidad autónoma en la que viva.

Sin duda la estación que verá la luz en Otero de Sanabria no obedece a un antojo, ni a la presión ejercida por los vecinos de la localidad que la acogerá.

Hace pocos días podíamos leer un pormenorizado informe elaborado por el Grupo Tren Zamora, en el que se reflejaban las cuestiones por las que se hacía necesaria la construcción de esa infraestructura. En estas cuestiones se planteó desde un primer momento la necesidad de construir por motivos técnicos, logísticos y de seguridad un Puesto de Adelantamiento y Estacionamiento de Trenes (PAET).

Esta infraestructura se construye en un punto intermedio entre dos capitales de provincia, Zamora y Orense. Un trayecto largo, de ahí su justificación logística. Se construye para poder evacuar o transbordar viajeros de un tren a otro en caso de emergencia o averías, de ahí su justificación en materia de seguridad. Y se construye con andenes y accesos porque, técnicamente, eso es un PAET.

Una vez que se cuenta con esta infraestructura, se aprovecha esta coyuntura favorable para, haciendo una pequeña inversión complementaria, dotar a la comarca de Sanabria con un recurso para poder desarrollar todo su potencial. Y es en este punto en que se unen los motivos técnicos y la voluntad política para que la zona Oeste de Castilla y León tenga acceso a una infraestructura que consideramos básica para el desarrollo de esa zona.

Desde el Partido Popular de Zamora siempre se ha defendido esa infraestructura, su idoneidad y su indudable utilidad en el futuro.

Seguramente algunos políticos del espectro nacionalista no conozcan la ubicación privilegiada en la que se enmarca la comarca de Sanabria, a camino entre Galicia y Castilla y León, con más de 6.500 habitantes y lindante con la ciudad de Braganza con 35.000 habitantes a apenas 40 km de Puebla de Sanabria y la Región Norte de Portugal, la más poblada del vecino país, región que carece de alta velocidad y que bien podrían utilizar esta infraestructura.

Estos factores limítrofes, junto a la población de toda la zona norte de la provincia de Zamora, son de por sí razones suficientes para derribar el argumento sensacionalista y mal intencionado leído y escuchado estos días de que la estación de Otero de Sanabria se construye para 26 personas.

Siempre he respetado las opiniones que puedan surgir contrarias a cualquier proyecto, pero esas objeciones o criticas no se pueden basar en mentiras, falsas informaciones sensacionalistas que bien pueden provocar enfrentamientos indeseados entre territorios ni en el desprecio a nadie.

La provincia de Zamora y la comarca de Sanabria se merecen esa estación y por eso la tendrán. Una vez construida, estará en la mano de los propios sanabreses el saber aprovechar las oportunidades que esta infraestructura les generará.

Su Lago, su paisaje, su historia, su patrimonio o su gastronomía serán sin duda el mejor atractivo para que el turismo que llegue a esa estación comarcal ayude al desarrollo de esta comarca que durante siglos vivió, debido a su ubicación y orografía, en un importante aislamiento que retrasó su desarrollo.