Parece que esta vez sí, que nuestros vecinos, que los ciudadanos de a pie están perdiendo el miedo a que no gobiernen el PP o el PSOE. Que por mucho que sus líderes nacionales y también los de nuestra provincia sigan apelando al voto del miedo, esta vez lo tienen más oscuro porque hay opciones que frente al temor proponemos ilusión para transformar España y para que nuestra provincia no se quede, una vez más, en el vagón de cola.

Nos jugamos mucho, y los zamoranos lo saben también. Estamos en una provincia donde nos han vendido que debemos resignarnos, que hay que tener paciencia, que el dinero público que nosotros también aportamos a las arcas del Estado no nos va a llegar porque hay otras prioridades y que toca sufrir recortes. Pues bien, desde Ciudadanos no nos resignamos, no abandonamos a las familias a su suerte, rechazamos los recortes y el tijeretazo a diestro y siniestro y, sin embargo, decimos sí a adelgazar la Administración, a acabar con diputaciones y consejos consultivos, coladeros de cargos, cuando no de corrupción; a reformar el IVA y bajar el IRPF para que la clase media y trabajadora pague menos impuestos, y a que todo ese dinero repercuta en las familias, en nuestros hijos y en nuestros mayores.

El problema de España no es solo del PP sino de los que han gobernado este país durante las últimas décadas dejándonos por nefasta herencia un modelo precario, que casi ha conseguido acabar con el estado de bienestar que tanto esfuerzo nos ha costado levantar a todos los españoles. Y esta es la realidad que se palpa en la calle, donde ya no tiene credibilidad su política de propaganda, de inversiones prometidas y, en realidad, arrancadas lamentablemente, en muchos casos, a costa de la pérdida y el dolor de muchas familias.

Como ejemplo tenemos la conversión en autovía de la N-122. Hicieron falta nuevas tragedias y la presión de la calle para que por fin se tomara en cuenta esta necesidad, cuyo inicio de obras anuncian ahora los populares "a bombo y platillo" para el 2017, como si hubiera sido iniciativa suya. Señores, un poco de dignidad, ha sido la pérdida de vidas en esa carretera y la presión de los zamoranos -no quiero pensar también que la cercanía de las elecciones- lo que ha conseguido arrancarles por fin la promesa de esa infraestructura, olvidada durante años por todos ustedes.

En parecidos términos se podría hablar de su AVE y, digo suyo, porque a día de hoy nadie lo ha visto todavía por Zamora. En octubre el señor Maíllo, la ministra Ana Pastor y otros cuantos líderes del PP se dieron un paseo hasta la capital subidos en un Alvia y pensaron que podían vendernos a todos que aquello era un AVE, sin un ápice de vergüenza.

Ciudadanos cree en el AVE, pero no en el derroche de dinero público del que hacen gala ustedes, en cuanto tienen ocasión. Y creemos también en promesas coherentes que dignifiquen otra vez la política, aunque nosotros no somos políticos profesionales como los representantes del PP y del PSOE. Quizás por esta razón, sabemos lo que nuestros vecinos nos demandan y escuchamos sus críticas y respondemos con medidas concretas como la supresión de los privilegios y los aforamientos, y la prohibición de los indultos a los corruptos.

Ciudadanos lo tiene muy claro: los corruptos y sus partidos devolverán hasta el último euro que roben a los españoles. No más presidentes mandando vergonzosos mensajes a imputados de sus partidos en la cárcel pidiéndoles que "aguanten y sean fuertes". Nos merecemos algo mejor.

(*) Candidata al Congreso de los Diputados por Ciudadanos Zamora