Tras una legislatura donde ha imperado el trabajo duro para enderezar una España que el Gobierno del PSOE dejó al borde del abismo, ha llegado el momento de que los españoles recojan los frutos de esta labor reformista que ha hecho Mariano Rajoy.

Claro que se puede. Ahora sí se puede devolver el esfuerzo que millones de españoles han realizado durante estos pasados cuatro años. Esfuerzos necesarios para reducir un déficit público que a comienzos del 2012, tras encenderse todas las alarmas, nos encaminaba sin remisión al rescate tras el paso por la Moncloa del Partido Socialista.

En la legislatura como la que ahora finaliza ha imperado el sentido común y el trabajo duro para enderezar una España hecha trizas por el ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero. Cuatro años en los que ha sido necesario que Mariano Rajoy y el Partido Popular hayan tenido que realizar una profunda política de reformas con el objetivo de garantizar la estabilidad de nuestro sistema.

No es fruto de la casualidad haber creado cerca de 600.000 puestos de trabajo durante este 2015 y poner el esperanzador listón de en los próximos cuatro años, si este Gobierno continua al frente, llegar a los 20 millones de ocupados.

Unas cifras a las que los propios dirigentes del empresariado de este país han dado la bendición coincidiendo efectivamente en que se está en el buen camino -porque ellos mismos están notando de lleno la recuperación-, apoyando estas medidas y confiando en que se mantengan por el bien de todos.

Todo lo que sea dar un paso atrás, derogar las estas medidas como proponen algunos partidos, será un freno para tantos y tantos españoles que poco a poco ven la luz y que desean seguir confiando en un Gobierno que, aunque le haya tocado trabajar en el peor escenario económico de los últimos años, ha logrado que España saque la cabeza siendo el país que más crecimiento económico presenta de la Unión Europea actualmente.

Ahora sí se pueden bajar los impuestos. Claro que se puede. Porque el Gobierno del Partido Popular tuvo que interpelar a la sinceridad más absoluta para decir a los españoles a primeros de 2012 que la situación de España era mucho más caótica que la que creían antes de llegar a la Moncloa.

Porque el Partido Socialista mintió en el déficit, porque congelaron las pensiones a sabiendas de que habían triturado la hucha que las mantiene, porque malgastaron más de 40.000 millones euros en un Plan E fatalmente estructurado porque buena parte de las obras ejecutadas no han servido para nada, y, entre otros descalabros, escondieron en los cajones un gran número de facturas sin pagar.

Hoy Mariano Rajoy puede anunciar, como ha hecho, esa nueva rebaja de impuestos -ya en 2015 se han beneficiado todos aquellos que ganan menos de 12.000 euros al año- al tiempo que, Pedro Sánchez y Pablo Iglesias hablan de subir impuestos.

El mundo al revés. Ahora que sí se puede, otros partidos plantean subir los impuestos. A buenas horas, cuando el Partido Popular ya ha hecho ese trabajo y es el momento de que los españoles disfruten de sus resultados.

Y como sí se puede, valga la reiteración, el Partido Popular bonificará con cotización 0 en sus primeros 500 euros a quienes formalicen contratos indefinidos, añadiendo esta gran medida a las ya adoptadas en esta legislatura por las que los contratos temporales que pasaran a fijos contaban ya con este beneficio.

Y esto será solo el inicio, porque tras un trabajo de recuperación económica y de reformas sin parangón en este país, hoy podemos decir que "se puede" y que todo lo que venga ligado al buen Gobierno del Partido Popular será una continuidad de bienestar y progreso para los españoles.

(*) Candidato del Partido Popular al Congreso de los Diputados por Zamora