Denunciamos a lo largo de todos estos meses que nuestra provincia estaba igual, si no peor en cuanto a las dramáticas cifras del paro. Que se estaban creando expectativas a través de contratos precarios, eventuales, muchas veces por horas y sin ninguna estabilidad. Que el PP y sus dirigentes mentían cuando decían que estábamos en el buen camino y, lo que es peor, se reían de todos en sus grandes actos de partido. Nos decían que tranquilos y que como afirmaba el inefable José María Aznar, "España va bien" y Zamora aún mejor.

Pues no es así, y las cifras del desempleo del mes de octubre han vuelto a darnos un lamentable golpe de realidad. El peor dato en las listas del paro en la provincia en la última década se merece un poco de respeto de los que antes nos contaban todos los meses lo bien que íbamos. Me pregunto dónde se esconden ahora.

Zamora y los zamoranos nos merecemos respeto, las miles de familias que están atravesando auténticos dramas y los más de 9.000 zamoranos en cuyas casas ya no entra ni un solo euro se merecen apoyo y soluciones realistas, y que no jueguen con sus ilusiones y sus esperanzas.

Ciudadanos no ha llegado al panorama político español para engañar a nadie ni para prometer nada que no pueda cumplir. No somos un partido populista que tan lamentables resultados ha cosechado en países de nuestro ámbito como Grecia. Aquí, su versión española de Podemos, no sienten rubor alguno cuando ofrece una renta básica de 600 euros, que saben no podrán llevar a cabo. Es sencillo, las cuentas no salen. Y dramático para las familias que se agarran a este clavo ardiendo.

Nosotros no entendemos la política así, no "jugamos" con la necesidad de nadie. Ofrecemos una manera de gestionar el dinero público distinta, un reajuste de las instituciones públicas para que, de una vez por todas, estén al servicio de los ciudadanos, y medidas económicas y contra el desempleo reales, que puedan volver a poner en marcha nuestra maquinaria económica.

Apostamos por eliminar la temporalidad de los contratos, por crear una renta complementaria para quienes no alcancen el salario mínimo anual, por bonificar a las empresas que despidan menos, por rebajar las cotizaciones para quienes contraten parados de larga duración y por planes de formación para desempleados eficaces.

No son recetas mágicas. Sabemos que el camino será duro, pero nosotros sí respetamos a los ciudadanos y no venimos a mentirles. Somos una formación de centro, sensata, que toma decisiones en función de lo que considera bueno para sus vecinos.

No pedimos que nos sigan sino que nos acompañen en un proyecto con el que queremos aportar soluciones. Y que nadie se equivoque, nosotros no entendemos el "cuanto peor, mejor". Nuestros enemigos no son los otros partidos y, ni mucho menos, sus votantes. Nuestros enemigos son el paro, la pobreza y la corrupción y contra ellos vamos.

(*) Candidato al Congreso de los Diputados por Ciudadanos Zamora