Como no podía ser de otra forma, el eximio, dicen que actor, Guillermo Toledo, alias Willy, ha realizado sus propias declaraciones con motivo del 12 de octubre. Este impresentable es de los que divide en lugar de unir. Este impresentable es de los que quisiera que ETA gobernara el País Vasco, la Cup Cataluña y España toda una suerte de descontentos, renegados, culos mal asiento y resentidos. Porque hay muchos resentidos. Pero no porque se les haya tratado mal desde el Gobierno que sea o desde la sociedad, sino porque han nacido en el seno de una familia humilde y eso lo llevan fatal. O porque no han tenido suerte en la vida y eso lo llevan peor.

Yo no puedo presumir de nada, porque vivo bajo el techo de mi buena madre. Y si no fuera por ella, aviada iba. Ni vengo de la pata del Cid. Ni soy terrateniente, tengo unas cuantas macetas en la terraza de casa, eso sí, muy bien cuidadas. Ni grandes ni pequeños caudales tengo. Y a esos que algunos llaman "los tuyos", nada les debo ni nada quiero de ellos. Y, parafraseando al poeta, mi infancia son recuerdos de una isla llamada Fernando Poo y una playa de arena negra donde pescaba estrellas de mar. Y como el poeta, recuerdo a los que critican e insultan en lugar de, en buena lógica, discrepar, que al cabo nada os debo; debéisme cuanto he escrito. A mi trabajo acudo, con mi dinero, por cierto escaso, pago el traje que me cubre y los gastos de la casa que habito junto a mi buena madre, el pan que me alimenta y el lecho donde yago. Desde luego, ni rencor alberga mi alma, ni resentimiento mi corazón.

Willy Toledo, no. Willy escribió en twitter con motivo del 12 de octubre: "Me cago en la fiesta nacional (yo me quedo en la cama igual, pues la música militar nunca me supo levantar). Me cago en la monarquía y sus monarcas". Para qué seguir ahondando en las olorosas defecaciones verbales de este individuo. Eso lo puede hacer y decir en esta España de las libertades, entre ellas la de una expresión mal entendida. En la Venezuela de Maduro o en la Cuba de los Castro, ya lo habrían enchironado o llevado ante un pelotón de ejecución por sedicioso. Por menos está encarcelado Leopoldo López, líder de la oposición venezolana. Ejemplares como Willy son los modelos que ciertos sectores radicales de la sociedad toman como ejemplos. Esta es la gente que quiere cargarse España. Esta es la gente a la que molestamos y por ello quisieran quitarnos de en medio, a los que amamos España, por la que tenemos que trabajar todos codo con codo, a los que presumimos de nuestra bandera, a los que escuchamos la música militar con emoción y respeto y respetamos los uniformes que visten unos hombres y unas mujeres que cuando la sociedad los necesita no piden el DNI, les da igual si se les ha insultado o rechazado, ellos están ahí para servir a España.