El 24 de septiembre la Iglesia celebra la advocación mariana de la Merced o las Mercedes. En 1218, San Pedro Nolasco tuvo una visión de la Virgen, que le inspiró para fundar una orden religiosa dedicada a la redención de los cautivos cristianos que eran llevados en aquel tiempo al norte de África. En el mismo siglo XIII ya hay constancia escrita de su denominación de "Orden de la Virgen de la Merced de la Redención de los cristianos cautivos de Santa Eulalia de Barcelona", por ser el lugar en el que se fundó. En la Diócesis de Zamora, la presencia mercedaria continúa en Toro, con los Mercedarios Descalzos, establecidos en 1886, y las Mercedarias Descalzas, presentes desde 1648. También han salido vocaciones de algunos pueblos para los Mercedarios Descalzos.