Bermillo nos ofrece en este duro agosto, que parece querer secarnos, un programa festivo, cultural y de ocio completísimo, porque en él se atienden de manera exquisita y muy completa todos los campos de la vida de nuestro tiempo, un tanto agitada por ese constante ir y venir de posibilidades que nos abruman, nos cansan y nos hacen perder oportunidades de disfrutar y, a la vez, conocer, aprender siempre y disfrutar con todo.
La Mayuela ha organizado desde que se inició agosto un atractivo programa en el que no ha olvidado detalle y que constituye un auténtico revulsivo cultural, dejando en muy bien lugar a esta asociación que ha alcanzado un gran nivel como colectivo organizador de actividades de dinamización rural. Bermillo es el corazón geográfico de una comarca abierta. Es, además, centro de concurrencia de vecinos de toda la zona, donde también es muy fácil encontrarte con personalidades del mundo de las letras.
Esta localidad representa muy bien el alma de una comarca que cuenta con una gran historia, limpia y pura y que, a lo largo de la historia y ahora mismo, nos da lecciones permanentes y supone ejemplo y estímulo de un paisaje duro pero inmortal.
Sayago marcó siempre con su paso corto pero seguro un inmenso caudal de verdades, sueños y hasta leyendas, historia viva e imborrable, aval y testigo que nos manda y nos obliga a seguir ese camino trazado a lo largo de varios milenios, como nos recuerdan esos puentes y caminos que de río a río nos llevan como también hace la historia. La Mayuela es un gran ejemplo de lo bien que se hacen las cosas en Sayago.
