Todos sabemos que es la primera vez que el papa Francisco visita como papa la América de lengua española, lugar donde se ha forjado la opción por los pobres; nada más llegar a Quito pidió al presidente Rafael Correa que ponga "especial atención" en los hermanos más frágiles. "Los pobres son la deuda de la América Latina", ha dicho el papa.

Ha asegurado el papa Francisco que en el Evangelio se pueden encontrar "las claves para afrontar los desafíos actuales valorando las diferencias y fomentando el diálogo y la participación sin exclusiones". Y ha añadido, además, que "la justicia social no es una forma de limosna, sino una verdadera deuda del Estado".

Durante su primera misa en Ecuador el papa Francisco hizo especial alusión a la familia y sobre el sínodo que se celebrará el próximo mes de octubre en el Vaticano, que como sabemos es fuente de discrepancias.

Su voluntad expresada en sus intervenciones es de apertura a las nuevas formas de familia, divorciados, parejas de hecho, gays, etc. etc?

Escuchaba, el día pasado, una vivencia que relataba el propio papa cuando aún vivía en Argentina, acerca de la negativa de un sacerdote a bautizar a un niño, hijo de una joven de veinte años, y cómo el papa Francisco rechazaba esa negativa y aceptaba el bautismo del niño, y elogiaba la valentía de esa joven madre que, sola, había tomado la decisión de tener a su hijo y bautizarle, pues, agregaba el papa Francisco, la Iglesia está para acoger y no para excluir, la Iglesia es madre y no madrastra.

En la homilía de la misa del martes día 7 de julio que celebró en el Parque del Bicentenario de Quito dijo "evangelizar es nuestra revolución. Nuestra fe es siempre revolucionaria. Es nuestro más profundo y constante grito".

Los cristianos no podemos hacernos los distraídos ante la situación de un mundo lleno de desigualdades, guerras y violencia.

El papa Francisco en Santa Cruz de la Sierra, en el Parque Cristo Redentor, en Bolivia, ha pedido perdón por los crímenes de la conquista. En Paraguay visitó el barrio de las chabolas de Asunción y elogió el esfuerzo de los chabolistas para superar las inclemencias del tiempo y las inundaciones de las últimas semanas.

En Paraguay el papa Francisco dio muestras de su firme intención de fomentar el diálogo al recibir al arzobispo de Sudamérica Tarasios, patriarca ecuménico de Constantinopla, quien expresó su alegría por estar juntos y porque el amor entre las Iglesias es una vivencia pura y real.

El papa Francisco fomenta el diálogo, defiende la justicia social, llama a la revolución pacífica, pide perdón, etc? provoca entusiasmo, suscita lagrimas, mueve los sentimientos más profundos del ser humano.

Si analizamos las frases pronunciadas en sus homilías en el viaje a América Latina veremos que son frases de reflexión profunda, que anuncian cambios profundos, valga la redundancia, en la Iglesia, especialmente en la Iglesia de los frágiles, de los pobres, que presumo serán rechazadas por los sectores más conservadores.

El papa ha dicho "un método que no da libertad a las personas para asumir responsablemente su misión de construir la sociedad, es el chantaje. Siempre es corrupción: si haces esto, te hacemos esto. La corrupción es la polilla, la gangrena de un pueblo". Fue aún más tajante: "Ningún político puede cumplir su rol si está chantajeado por corrupción. Esto se da en todos los pueblos del mundo, pero si un pueblo quiere mantener su dignidad, tiene que desterrarlo".

Del papa, tras este largo viaje, se dijo "está cansado, pero goza de buena salud". Dios se la conserve durante muchos años, pues es el papa que necesitamos, humano, abierto, cercano, que se hace eco de nuestros problemas y habla con claridad a la hora de denunciar las injusticias a nivel mundial.

Próximamente hablaremos de su encíclica "Laudato si" .

Pedro Bécares de Lera