El primer domingo de julio, en torno a la fiesta de San Cristóbal y en el inicio de las vacaciones de verano, desde la Comisión Episcopal de Migraciones de la Conferencia Episcopal, en la tarea que corresponde al Departamento de la Pastoral de la Carretera, se convoca la Jornada de responsabilidad en el tráfico, que este año lleva por lema "La prudencia, guía experta para el camino". En su carta para este día, el obispo presidente de la Comisión, Ciriaco Benavente, llama a los conductores a que se cree en el automóvil "un clima que nos invite a dirigirnos a Dios con una breve oración, una sencilla mirada al cielo, haciendo la señal de la cruz al iniciar o terminar el viaje, o escuchando orar a los acompañantes o por la radio, con tal de que sea compatible con nuestra atención a la conducción".