El nacionalismo a ultranza vasco ya no sabe qué hacer para rizar el rizo. ¿Recuerda lo del Rh que propugnaba Arzalluz, y luego lo del DNI vasco que tanto dieron que hablar y de lo que escribimos todos hasta la saciedad? Vuelven a la carga. Como pinta mal para el euro, no se les ha ocurrido otra cosa que impulsar un proyecto para acuñar la moneda vasca y que sirva como alternativa a la europea. Lo mismo, hasta logran situarla y se hacen de oro. Puede pasar cualquier cosa.

El Gobierno de Patxi López anda a la cuarta pregunta por la acumulación de deuda y déficit. A lo mejor la solución pasa por la «Euskalmoneda» que, además, será ecológica, para mayor gloria del ecologismo nacionalista vasco de allende y aquende los Pirineos. Los promotores de la idea pertenecen a una asociación ubicada en el sur de Francia y parecen tener las ideas muy claras al respecto. Me da que la cosa no debe salir barata por lo que tendrán que echar muchas cuentas, además la «Euskalmoneda» solo podrá utilizarse en la Vasconia francesa y en la española. Quieren hacerlo todo muy democrático, muy a la vista y llevarán incluso a consulta el nombre y todo lo demás.

Esta gente se ve muy capaz de sacar adelante su proyecto. Son tan diferentes en todo y en lo que no, lo son con matices, que a todos los experimentos independentistas que realizan, unos más conocidos que otros, han querido añadirle este que es del todo significativo y que de producirse viene a ponerse en marcha en el peor momento. Con una Europa tocada y una moneda única que obliga a planteamientos de todo tipo, hay a quienes no les importa invertir en dinero que en realidad vale poco o casi nada. Para transacciones internas solamente. Pero una vez que se salga de las lindes vascas no tienen nada que hacer. Le invito a entrar en la página web de euskalmoneda.org para que se entere de los pormenores y de los pormayores. Citarlos aquí sería una publicidad excesiva para un proyecto ridículo que se le ha ocurrido a unos desocupados que abogan por ponerle también cara y cruz a la cosa identitaria.

Son y se sienten tan diferentes que tienen que experimentar con todo, ¡hasta con gaseosa! Lo de la moneda va en serio. Pretenden ponerla en circulación a finales de año y, de esa forma, tratar de impulsar el uso público del euskera en los comercios. Hay que preservar la cultura vasca como sea. Y si en el empeño por la preservación hay que ponerle añadidos como el de la moneda, se ponen y no pasa nada. En el País Vasco lo vasco, solo lo vasco y nada más que lo vasco. Y en eso son iguales los que hablan con acento francés que los otros que habitan un poco más para acá de los Pirineos. Todos son iguales a los ojos de Sabino Arana, salvo aquellos de pureza sanguínea dudosa. La última iniciativa, esta de la moneda, dará que hablar. Salvo que el proyecto, claro, se quede sólo en eso, que también es posible.