Vamos a reflexionar para ayudar a nuestro nuevo concejal de Juventud, Ocio, Tiempo Libre y Redes Sociales a comprender la Historia; porque la Historia, además de conocerla, es necesario comprenderla, más que nada para no meter la pata y hacer comentarios que pueden herir la sensibilidad de los ciudadanos.

Sí, vamos a reflexionar sobre las mayorías y las minorías a lo largo de la Historia de nuestro planeta y darnos cuenta de que una mayoría, por el hecho de serlo, no lleva la razón y, voy más allá, que han sido las minorías las que han conseguido cambios a mejor y evolución positiva en las sociedades humanas.

Señor concejal Víctor López de la Parte, el otro día usted, en una rueda de prensa, dio una respuesta que seguramente fue fruto de la falta de reflexión. Una periodista le preguntó si iban a tener en cuenta ustedes, el gobierno de esta ciudad, a aquellos zamoranos que se muestran en contra del maltrato animal y, más concretamente, de las corridas de toros, como espectáculo anacrónico, cruel y sangriento que se ceba con un animal que no consigue que nadie tenga en cuenta sus derechos, y que se perpetró una vez más el domingo en nuestra ciudad. Y usted respondió que no, que no se iba a tener en cuenta a una minoría porque el Ayuntamiento de Zamora tiene que atender a la mayoría.

En primer lugar, no son mayoría ¿Por qué está tan seguro de que eso es lo que quiere la mayoría? ¿De verdad cree que la mayoría de las personas de Zamora quieren que se lleve a cabo un acto tan cruel como la tortura y muerte de un animal? ¿Y que ese acto sea financiado con dinero público? Es verdad que para muchas personas ese tipo de espectáculos es una tradición que hay que mantener, incluso apoyar desde la Administración; personas que anteponen su diversión (repugnante forma de divertirse) a los derechos de un animal a no ser maltratado y matado. Es verdad, no se lo negamos. Pero no esté tan seguro de que esa sea la opinión de la mayoría, incluso aquí, en Zamora. Pero, aún aceptando barco como animal acuático, el Ayuntamiento de Zamora, como representación y amparo de todos los ciudadanos debería, al menos, escuchar todo lo que se tiene que decir desde cualquier colectivo y estudiar cada propuesta. Y luego sí, mirar y luchar por el interés de una mayoría, aunque eso no siempre sea ético y justo y pueda ocasionar perjuicios a terceros (pero como son terceros minoritarios?).

En segundo lugar, me gustaría recordarle que durante cientos de años y todavía hoy, muchas minorías son perseguidas y oprimidas sólo por pensar diferente. Que muchas minorías e incluso individuos solos han sido ejecutados por defender teorías que, tras decenios de causar indignación o carcajada, han resultado ciertas. Los principales ejemplos, sólo en el siglo XX, de mayorías que te quitan el aliento, son la Alemania nacionalsocialista, la Unión Soviética y la China de Mao. Reflexione. Eso es comprender la Historia y reflexionar sobre mayorías y minorías.

En tercer lugar, los rebaños de ovejas son mayoría. Oiga, que no tienen ni una oveja que decida ir por otro camino. Ahí van, unas detrás de otras.

En cuarto lugar, aprovecho para volver a hacerme una pregunta que sigue sin respuesta: si tan rentables y seguidos son los espectáculos taurinos ¿por qué necesitan de buena parte de mis impuestos para seguir celebrándose?

Y un par de datos, para los que aún tienen capacidad de leer, pensar, reflexionar y tomar decisiones propias, como individuos y no como parte de una masa mayoritaria, es decir, para valientes con la sabiduría necesaria para cambiar de opinión y reconocerlo sin rubor, con orgullo: yo cambié de opinión: las corridas de toros reciben, aproximadamente, cada año, en Zamora, unos 55.000 euros. Estamos hablando de 3-4 espectáculos a los que asisten, siendo generosos, unas 2.000 personas. Qué le parece si hacemos una comparación, por ejemplo, con la perrera municipal, responsabilidad del Ayuntamiento y que en los últimos días está de triste actualidad. La perrera de Zamora trabaja los 365 días del año. Todos los días, llueva, nieve o haga calor, sabemos de animales abandonados. Todos los días del año hay, al menos, una persona que va a limpiar, a dar de comer, a llevar al veterinario a los animales abandonados. Para llevar a cabo esta actividad que repercute en el bien de todos los animales y de todas las personas de Zamora, se necesita mano de obra, personal y maquinaria, y gente especial capaz de dar su tiempo en esta causa. Todos los días. Cada día de cada mes los perros y los gatos abandonados comen, beben, necesitan refugio y cuidados veterinarios. Y, por si el Ayuntamiento todavía no se ha enterado, repito: todos los días. Pues bien, para esto, reciben una aportación de 20.000 euros anuales, cantidad que ya tiene prevista una reducción drástica para 2012.

Reflexione, López, reflexione.

(*) DAZ (Defensa Animal Zamora)