La gallega Támara Echegoyen y la cántabra Berta Betanzos tenían este jueves las ilusiones puestas en ganar una medalla en los Juegos Oímpicos, incluso con muchas opciones de oro, en la clase 49er. FX, pero han sido cuartas en la general y se han quedado sin ella, lo mismo que la vela española, que se va de vacío de Río 2016.

Echegoyen y Betanzos, junto con la windsurfista Marina Alabau, eran las más serias opciones de medalla de la delegación española en los Juegos brasileños, pero la sevillana fue quinta en la competición de RS:X, por lo que todo quedó en la confianza de que en la última jornada del programa de vela en Río llegara la alegría para el equipo.

Este deporte llevaba tres citas olímpicas dando medallas -Atenas 2004, Pekín 2008 y Londres 2012- y en la historia ha aportado diecinueve al palmarés olímpico, por lo que ahora se va de vacío con solo los diplomas de Marina y del Echegoyen/Betanzos.

En esta 'Medal Race' que disputó la clase 49er. FX en el campo de regatas Pan de Azúcar de la bahía de Guanabara la opciones estaban claras y sólo cuatro de las diez embarcaciones en liza optaban a los metales.

Las brasileñas Marine Grael, ésta hija del gran regatista Torben Grael, ganador de cinco medallas olímpicas, y Kahena Kunze fueron las que lograron el objetivo del oro como anfitrionas.

Las neozelandesas Alex Malone y Molly Meech, segundas en la 'Medal', lograron la plata y las danesas Jena Hansen y Katja-Steen Salskov-Iversen, quienes acabaron esta prueba en cuarta posición por detrás de Italia, se llevaron el bronce.

La españolas fueron séptimas en la 'Medal Race' y con todas sus contrincantes directas por encima en la clasificación, por lo que se han tenido que conformar con la cuarta plaza en la general.

Las miradas estaban puestas en estos cuatro barcos, ya que los que fueran llegando primeros se irían adjudicando las medallas paulatinamente, sin mas matemáticas.

Pronto se truncó la regata para las españolas, que en la salida tuvieron que hacer una maniobra para evitar una colisión con las británicas y ya desde ese momento vieron a sus contrincantes desde atrás.

La primera boya la pasaron octavas, la segunda séptimas y la tercera sextas, y en ese momento llegó la esperanza de agarrar el bronce porque marcaban muy de cerca a las danesas, que iban quintas, pues el oro y la plata ya era pelea de brasileñas y neozelandesas.

La cuarta marca también pasaron sexta y las densas quintas, pero una maniobra para arriesgar y sobrepasarlas no prosperó, las rivales se fueron a la cuarta plaza, en la que acabaron, y las españolas al final fueron séptima y con ello cuartas en la general.

La llegada a las arenas de la playa Flamengo fue un contraste de alegría desbordada al haber ganado las anfitrionas y la tristeza en el equipo español que fue a recibir y consolar a Echegoyen y Támara, incluso con la presencia del presidente del Comité Olímpico Español (COE), Alejandro Blanco.

En los rostros de las dos regatistas no se podía ocultar la decepción y las lágrimas por algo que tenían muy cerca después de una gran serie previa de doce regatas que daban pie a la ilusión, en el caso de la gallega de conseguir su segunda medalla olímpica.

Tampoco la otra participación española de la jornada cumplió con mejorar las expectativas.

En el 49er. masculino, la embarcación neozelandesa formada por Peter Burling y Blair Tuke se proclamó campeona olímpica, una competición que ha dominado con rotundidad.

Los neozelandeses llegaron a la 'Medal Race' con el oro asegurado y en la regata final han vuelto a vencer. Plata fue para los australianos Nathan Outtergide y Iain Jense y el bronce de los alemanes Erik Heil y Thomas Ploessel.

En la sexta posición de la 'Medal Race' se situaron Diego Botín y Iago López, lo que les ha valido para mantenerse novenos en la general y sin el diploma olímpico que perseguía en su debut en unos Juegos.

Los españoles, tras las doce regatas de la serie previa se situaron novenos y tenían opciones de ser hasta quintos, aunque su sexto puesto en la 'Medal' no les ha movido en la general.