Los Mossos d'Esquadra han continuado esta mañana con la búsqueda de pruebas contra el detenido por la muerte de la pareja del pantano de Susqueda. Los agentes han vuelto a llevarle a sus propiedades para rastrear los terrenos en busca del arma del doble crimen. Los agentes, vestidos con monos blancos que apenas se distinguían en el paisaje nevado, portaban detectores de metales durante los trabajos. También estarían tratando de localizar la ropa que vestía el detenido el día del suceso para contrastar si hay restos de ADN de los fallecidos. Jordi Magentí ha estado presente en los trabajos aunque no ha abandonado el coche policial en el que era trasladado.