El hostelero insumiso del restaurante de Guadalmina (Málaga) da marcha atrás en su lucha contra la ley Antitabaco y acatará la ley como el resto de la hostelería. La Junta de Andalucía le mantiene la sanción administrativa de 140.000 euros pero le autoriza a reabrir el asador, clausurado desde el jueves. José Eugenio Arias-Camisón confiesa que lo hace por "imperativo legal" pero, sobre todo, por sus 16 trabajadores y para frenar las pérdidas.