El fuego fue imparable. Arrasó toda la torre Grenfell. En apenas 15 minutos el bloque, de 24 plantas, estaba cubierto por las llamas. Si ardió tan rápidamente, se debe, según los investigadores, a la cubierta del edificio, de polietileno. Ese revestimiento se añadió para que el edificio tuviera un aspecto más moderno. La reforma se terminó el año pasado. Costó cerca de 9 millones de euros. Primó la apariencia más que la seguridad. Con solo 5.700 euros más, podrían haber asegurado el edificio. Pero eso no se hizo. Desde hace años, los vecinos venían denunciando anomalías y falta de seguridad en la torre. El origen del incendio podría estar en la nevera de una vivienda de la cuarta planta del edificio. Ahí comenzaría un fuego que pronto se propagó por las plantas superiores. Decenas de personas quedaron atrapadas. Muchos pedían ayuda desde las ventanas, esperando ser rescatados. Otros descendieron uniendo sábanas. Hay ya 30 víctimas mortales confirmadas. Entre ellos, Mohamed, refugiado sirio, que vivía en el piso 14. Mohamed es la primera y única víctima identificada del incendio. Se pueden tardar semanas en saber el número total de víctimas y, según los investigadores, muchas no podrán nunca ser identificadas. Theresa May anunció el jueves la apertura de una investigación pública sobre el incendio. Las protestas se suceden en las calles. Llegan hasta el Ayuntamiento de Kensington y Chelsea. Quedan todavía decenas de desaparecidos. Familiares y amigos colocan carteles. Mientras, se recoge comida y otros enseres para ayudar a quienes lograron escapar del fuego.