La música en el Divina Providencia

Tocamos, bailamos, cantamos. Y eso es muy necesario en el tiempo que vivimos.

En nuestra sociedad nos hemos dado cuenta de que necesitamos a gente que sea capaz de estar en una orquesta, de bailar en grupo, de cantar en coros, de escuchar y disfrutar, que sea capaz de experimentar la música de distintas formas. Al trabajar con niños en el colegio, he visto la diferencia increíble que puede suponer la vocación musical, porque no es solo aprender a tocar la flauta o la guitarra, sino trabajar en equipo, tener más autoestima, poder concentrarte en algo. También tiene un impacto en las familias, en las vidas sociales de cada uno. La música, a la larga, nos hace ser más capaces para llegar a ser mejores profesionales en el ámbito que sea.

El ritmo diario y los compases que llegarán a tener los niños en el futuro cuando sean mayores, sin duda estará influenciado por la atención que pongan en cada una de las cosas que hagan, en la musicalidad y cariño al trabajar en equipo con otras personas a las que tendrán que adaptarse en sintonía rítmica y melódica.

Ya desde un año conocen los instrumentos de percusión y acompañan diferentes tipos de música, sí, antes de hablar, bailan y tocan.

Es una maravilla ver a los alumnos con la guitarra colgada en la espalda yendo al colegio. Supone esfuerzo en todos los sentidos: tiempo de ensayo en casa, dolor de dedos? pero, cuando los acordes empiezan a sonar, es tal la recompensa que merece mucho la pena.

Afortunadamente, en Zamora cada vez nos vamos dando cuenta y la educación musical llega a más niños. Desde el Divina Providencia siempre hemos tenido en cuenta este aspecto y hemos aumentado el interés a través de nuestro coro, danzas y bailes en Educación Física y el aprendizaje de varios instrumentos. Es, por tanto, la música un medio de aprendizaje integral y de expresión.

Nos consideramos centro BIT (Bilingüe, Inclusivo y Tecnológico) y en ello también tiene que ver mucho la música, porque aplicamos este cambio metodológico gracias al trabajo cooperativo, la inclusión que se consigue en los coros de alumnos y la enseñanza musical.

Los beneficios de la enseñanza musical para el desarrollo de los niños se notan en la importancia para la plasticidad del cerebro, independientemente de si el talento del niño le permitirá hacer una carrera musical o simplemente aprender a tocar un instrumento, a bailar o a cantar.

Se trabajan las emociones y estos aprendizajes suman positivamente en la convivencia del centro "porque la música es importante para crear un buen clima de trabajo, que sea alegre, pero bien hecho". Además, se nota la mejoría en aquellos alumnos que tienen problemas de dicción, porque la música ayuda a trabajar esas cuestiones. Por otro lado, los alumnos son más desenvueltos y a la hora de actuar en público lo hacen con naturalidad y son muy resueltos, además de ser muy importante por la creatividad que desarrollan.

La educación musical da mucho juego en la enseñanza porque es interdisciplinar. La música son matemáticas y la lengua, la historia, la ecología, la educación vial, la igualdad, son temas que se pueden trabajar con ella porque, al final, todas las capacidades que se trabajan desde Infantil también se trabajan en música. Todo va entrelazado, lo que conduce hacia un aprendizaje significativo.

La aplicación de la música "mejora las relaciones" entre alumnos, que deben trabajar en equipo para sacar adelante el trabajo del coro, y cumple lo que marca la normativa educativa respecto a los currículos. Además, abogamos por el trabajo por proyectos, estamos en la educación del siglo XXI. Subimos nuestras representaciones al canal de YouTube Colegio Divina Providencia, que ya cuenta con un total de 3.500.000 de visualizaciones.

Lo que dejan claro es que la enseñanza musical en Infantil y Primaria mejora el aprendizaje y ayuda a educar la sensibilidad artística.

No olvidemos que el propósito de la educación es ayudar a los niños a que disfruten y estén entusiasmados respecto a la vida.