El Gobierno pondrá fin a la comisión de dos euros que decidió aplicar CaixaBank este año a quienes no eran clientes de la entidad y utilizaban su red de cajeros para retirar dinero, una iniciativa que inicialmente se mostraron dispuestos a seguir BBVA y el Banco Santander.

Está previsto que el Consejo de Ministros de este viernes apruebe un real decreto ley con el objetivo de que en España sólo se pueda cobrar al usuario una comisión por sacar efectivo de los cajeros automáticos de un grupo financiero del que no es cliente. Rajoy ha confirmado la intención en una entrevista esta noche en Antena 3.

A partir de ahora, cuando una persona retire dinero en un expendedor de otro grupo, la entidad emisora de la tarjeta será quien cobre a su cliente, aunque deberá pagar la tasa de servicio a la institución dueña del cajero.

Desaparecerá así la posibilidad de que el usuario se vea obligado a pagar el recargo de dos euros que implantó CaixaBank y que tanta polémica ha generado, aunque su propia entidad puede reclamarle luego una comisión por haber usado las instalaciones de otro grupo.

Eso dependerá de la relación que mantenga cada usuario con su entidad, puesto que muchos bancos aplican cero comisiones a los clientes con los que existe mayor vinculación y, además, en las últimas semanas han surgido acuerdos entre entidades para reducir considerablemente las tasas de servicio que se aplican entre ellas.

Un ejemplo es la alianza alcanzada entre una decena de entidades, lideradas por Bankia y Banco Sabadell.

No obstante, otras instituciones seguirán aplicando tasas de servicio a sus competidores por facilitar efectivo a sus clientes, un cargo que, en última instancia, se podría acabar trasladando al usuario en forma de comisión, cargada directamente por su banco, caja o cooperativa de crédito.