Pendientes del cielo ante la amenaza de lluvia en los partes meteorológicos El Perdigón y El Cubo del Vino son las dos localidades de la comarca que preparan de cara a esta noche los desfiles procesionales del Miércoles Santo. A partir de las nueve de la noche es tradición que se celebre en el Cubo la procesión infantil del Silencio, en la que participan críos de 5 A 14 años de edad, quienes realizan el juramento del Silencio en la iglesia de Santo Domingo antes de marchar en comunidad recorriendo las calles más céntricas del pueblo mientras los fieles acompañan con sus rezos este peculiar desfile que cuenta con pequeñas imágenes, lo que hace menos penosa su carga para los participantes.

En El Perdigón, y a partir de las once de la noche, la Hermandad Penitencial Cristo de la Misericordia se congrega en la iglesia parroquial de San Félix, donde prometen penitencia, oración y silencio ante la imagen del santo Cristo para comenzar media hora después la procesión, dando la vuelta al templo para continuar por el Pozo y Plaza de España antes de retornar a su punto de partida para rezar la última estación del Via Crucis.

Al día siguiente, Jueves Santo, en este mismo pueblo la Cofradía de Jesús Nazareno desfilará también por la calle Bodegas, la Iglesia, Plaza de España y el Pozo acompañada por los nazarenos y la música de la Banda de Cornetas y Tambores local. Media hora más tarde está prevista la procesión del Nazareno en Morales del Vino y en Corrales, donde la hermandad del Santo Cristo Corralino sale a la calle tras la celebración de la misa en la iglesia de Santa María Magdalena. Una cofradía con hábito propio de estameña que imprime carácter monacal a los desfiles de la Semana Santa. Igualmente en Villaralbo la procesión del Nazareno sale a la calle acompañada por los hermanos de la cofradía, que visten también de raso color morado, caperuz amarillo y cíngulo del mismo color.

El Viernes Santo también la procesión de Nuestra Madre tiene reconocimiento tanto en El Perdigón, donde es la cofradía que más hermanos registra en el censo, como en Villaralbo o la del Santo Cristo Corralino en Corrales.

El triduo pascual culmina en la vigilia que se conmemora en la noche del Sábado Santo en prácticamente todas las parroquias dando paso al Domingo de Resurrección, cuando los cohetes y las campanas anuncian la resurrección de Jesús.