Con la bendición de los ramos de laurel en todas las iglesias de la comarca del Vino se celebraba el Domingo de Ramos que inauguraba la Última recordando la entrada de Jesús en Jerusalén. En pueblos, como Villaralbo, además de la bendición de ramos de laurel y las palmas por parte del sacerdote, Jesús Antonio Martín de Lera, la Cofradía de Jesús en su entrada en Jerusalén y Triunfal de Resurrección daba especial realce a esta celebración en el mundo rural con un desfile con indumentaria oficial de los 115 hermanos y al que se incorporaba muchos fieles que marchaban en procesión con los ramos de laurel.

Era a las doce y media del mediodía cuando se concentraban los miembros de la cofradía en la Plaza Mayor mezclados entre el público antes de iniciarse el itinerario oficial por la calle Fernando Gutiérrez, San Ildefonso, Miguel de Unamuno, San Isidro y otras vías urbanas antes de volver al templo donde se celebraba la misa del Domingo de Ramos.

En esta edición, el paso de la Borriquita estrenaba andas de madera realizadas por el tallista zamorano José Antonio Pérez Un paso obsequio de dos hermanos en el 2011, fecha en la que arranco esta Cofradía gracias al impulso de miembros de la Asociación de la Banda de Cornetas y Tambores de Villaralbo.

Los hermanos y hermanas vestidos de túnica de raso blanca, manguitos rojos y gorro hebreo para los niños marchaban en fila al lado del público de calle que acompañaba a la Borriquita, un paso compuesto por pequeñas figuras, a la par que se oían la música de la Banda de Cornetas y Tambores de Villaralbo y la de Nacor Blanco que participaba un año más de la procesión del Domingo de Ramos en esta localidad de la comarca del Vino.

A partir del miércoles santo, con el desfile de niños en la procesión del Silencio que se celebra en Cubo del Vino se inician en otros pueblos de la comarca importantes desfiles procesionales en los que se involucran muchas personas que mantienen esta devoción a pesar de la despoblación que reina en los pueblos. Es el caso de los desfiles que durante el Jueves, Viernes y Domingos se celebran en pueblos como El Perdigón, Corrales del Vino, Villaralbo, Cubo o Morales del Vino.

Otra localidad en la que celebraban procesión era Venialbo. Tras la bendición de las ramas de laurel a cargo del párroco Manuel de Miguel los vecinos recorrieron las calles cercanas a la iglesia portando dichas ramas y cantando canciones religiosas.