El portugués Miguel Oliveira (KTM) sumó su cuarta victoria de la temporada al imponerse en el Gran Premio de Australia de Moto3 que se ha disputado hoy, domingo, en el circuito de Phillip Island y con ella evitó la consecución matemática del título al británico Danny Kent (Honda).

En una carrera que resultó muy accidentada ya que apenas concluyeron la misma diecinueve pilotos, el triunfo de Miguel Oliveira le sitúa a cuarenta puntos de Danny Kent en la clasificación provisional del mundial.

Junto a Oliveira en el podio de Phillip Island acabaron el español Efrén Vázquez (Honda) y el surafricano Brad Binder (KTM), en tanto que Jorge Navarro (Estrella Galicia 0'0 Honda) se tuvo que conformar con la cuarta plaza e Isaac Viñales (KTM) con la octava.

La fémina María Herrera (Husqvarna) estuvo durante casi toda la carrera en las posiciones de puntos y tras pelear en un nutrido grupo de pilotos consiguió la undécima plaza, su mejor resultado de toda la temporada.

El francés Fabio Quartararo (Estrella Galicia 0'0 Honda) fue la primera baja de la carrera de Moto3 al continuar con fuertes molestias en el pie derecho, que se lesionó en el Gran Premio de Misano Adriático y que le obliga a andar con muletas.

Quartararo no se encuentra plenamente recuperado, ya que la lesión le impide pilotar en condiciones, razón por la que no disputó ni la carrera de Aragón, Japón y ahora Australia y tampoco lo hará en Malasia la próxima semana.

El francés no pudo pasar de la vigésimo segunda posición de entrenamientos debido a los problemas que todavía arrastra y aunque hizo un último intento en los entrenamientos libres de esta mañana, al final optó por retirarse para intentar dar el mayor descanso posible a su maltrecha articulación.

El italiano Romano Fenati (KTM) y el portugués Miguel Oliveira (KTM) fueron los más rápidos en la salida, pero el líder del mundial, el británico Danny Kent (Honda), no se dejó sorprender y se colocó en el grupo de cabeza, junto a su compañero de equipo, el español Efrén Vázquz y el resto de aspirantes al podio en Phillip Island.

Por detrás, el italiano Enea Bastianini (Honda), el único que podía impedir que Kent se proclamase matemáticamente campeón del mundo, salió desde una retrasada vigésimo octava posición pero ya en el primer giro era decimoquinto.

Como también merece mención especial el debutante español de la categoría, Joan Mir, quien desde la decimoctava plaza de la formación de salida pasó a la décima en la segunda vuelta, metido de lleno en el grupo de cabeza de carrera, al igual que el italiano Francesco Bagnaia (Mahindra), que partió trigésimo y en apenas cuatro vueltas luchaba por el liderato de la prueba.

Aunque duró poco la buena actuación del piloto de Mallorca, pues se vio involucrado en la séptima vuelta en una caída en la curva cinco del trazado con el italiano Andrea Migno y el británico John McPhee (KTM), que les impidió continuar, como también poco después al español Juanfran Guevara (Mahindra).

El ritmo impuesto en cabeza de carrera propició un corte que dejó a siete pilotos marcando el ritmo, con el surafricano Brad Binder (KTM) al frente, pero también con el líder del mundial Danny Kent, además del checo Karel Hanika (KTM), el portugués Oliveira, o el italiano Bagnaia, que se cayó también poco después y sacó de pista al británico Kent -que regresó decimosexto a la carrera-, y los españoles Efrén Vázquez y Jorge Navarro.

Pasado el ecuador de la carrera se colocó líder de la carrera Miguel Oliveira y, además de Kent, se fueron para atrás en el grupo principal Romano Fenati y Karel Hanika, que se fue por los suelos algo después, mientras que el italiano logró enlazar nuevamente.

Pero todavía quedaba mucha carrera y algunas sorpresas en forma de caídas, puesto que Danny Kent, en su remontada tras salirse de la pista por la caída de Bagnaia, se encontró en el grupo de los italianos Enea Bastianini y Niccolo Antonelli, quien le tocó por detrás cuando el inglés le estaba adelantando por el exterior y provocó que todos ellos se fueran al suelo.

Kent ya no dependía de si mismo para ser campeón del mundo, pues fuera de carrera tanto él como Bastianini, aunque Antonelli pudo continuar pero acabó fuera de los puntos, Miguel Oliveira era el único que podía impedir matemáticamente su proclamación, aunque para ello sólo le valía acabar en el podio.

Las cinco vueltas finales fueron un duelo al milímetro entre Brad Binder, Romano Fenati, Miguel Oliveira, Jorge Navarro, Efrén Vázquez y Jakub Kornfeil, con constantes adelantamientos entre todos ellos.

Un poco más atrás rodó un grupo de pilotos en el que entre otros estaban los españoles Jorge Martín (Mahindra), que se fue al suelo pero pudo continuar para concluir decimoquinto, Isaac Viñales (KTM) y la fémina María Herrera (Husqvarna), peleando por la séptima posición.