La Policía Municipal identificó durante la noche del sábado a un centenar de menores que se encontraban consumiendo alcohol en la vía pública. Los agentes, a instancias del Ayuntamiento de Zamora, permanecen alerta en una labor disuasoria que busca terminar de una vez por todas con jóvenes menores de edad ingiriendo alcohol durante las diferentes propuestas de ocio nocturno de las Ferias y Fiestas de San Pedro. El concejal de Seguridad Ciudadana, Antidio Fagúndez, asegura que al margen de esta problemática, las últimas noches se han saldado sin mayores incidentes. Además, ha informado de que la guardia local ha conseguido, de una vez por todas, evitar que jóvenes peñistas se suban a los carros durante los eventos musicales.
La campaña de disuasión con menores materializada por la Policía Municipal durante las Ferias y Fiestas de San Pedro está dando resultados tras cuatro días con problemas, desde que se iniciaran las celebraciones el pasado miércoles día 22 de junio. "Este sábado, por primera vez, la Policía Municipal ha conseguido que ningún joven de las peñas se subiera a los carros, que era uno de los principales problemas con los que nos estábamos encontrando", apunta el edil. "Lo que sí se produjeron durante esa misma noche del sábado fueron identificaciones a menores. La Policía Municipal procedió a identificar a más de un centenar de menores de edad que se encontraban consumiendo alcohol en la vía pública", explica Fagúndez.
Los servicios sanitarios de Cruz Roja, por su parte, tuvieron que atender el sábado varias incidencias de diversa consideración. En el Zamora Summer Festival, la cita en el Ruta de la Plata, fueron atendidos cuatro varones: uno de 20 años por agitación; un menor de 16 años por una herida en la pantorrilla; y dos varones de 24 y 23 años por intoxicación etílica. También una menor de 16 años precisó de ayuda médica por un traumatismo craneal.
Al mismo tiempo, en el festival indie que se desarrollaba en la Plaza Mayor, dos menores, una chica de 14 años y un chico de 16, fueron atendidos por intoxicación etílica. La que precisó mayor atención por la gravedad fue una mujer de 61 años, que tuvo que ser trasladada al Servicio de Urgencias del Hospital Virgen de la Concha por traumatismo facial e intoxicación etílica.
