España se cruzará en cuartos de final con Francia, un rival con nuevas ilusiones en la Eurocopa 2012, tras la polémica y el fiasco en el Mundial de Suráfrica, y que terminó en el segundo puesto de su grupo y rompió una racha de 23 duelos invicto por una inesperada derrota frente a Suecia (2-0).

No le bastaron el empate contra Inglaterra (1-1), con quince disparos a puerta y sólo un gol, ni la notable victoria frente a Ucrania (0-2) en las primeras dos jornadas para conseguir la primera plaza, ya que el triunfo británico de esta noche le condenaron a la segunda posición y en el camino de la selección española.

Es un gran reto para los hombres de Laurent Blanc, que juegan al ritmo de las indudables cualidades de jugadores como Franck Ribery, Karim Benzema o Samir Nasri y que cuentan con la irrupción de nuevos talentos como el centrocampista del Newcastle inglés Yohan Cabaye.

Ya pasada su convulsión en los últimos grandes torneos, sobre todo el Mundial de 2010, donde ofreció una pésima imagen por el enfrentamiento entre parte de la plantilla y el seleccionador Raymond Domenech, con eliminación incluida en la primera fase al sumar sólo uno de nueve puntos, Francia ha abierto una nueva era.

Al mando está el carismático Laurent Blanc, campeón como jugador del Mundial de 1998 y la Eurocopa de 2000 y ahora en el banquillo del equipo nacional de su país con la misión de devolver al combinado entre los mejores del continente, su sitio habitual antes de las decepciones de los últimos años.

A su brillante Mundial de Alemania 2006, en el que eliminó a la súper favorita Brasil y fue subcampeona, tras perder la final contra Italia, le siguieron tiempos grises, transformados en esperanza con la fase de clasificación para la Eurocopa de 2012, en la que sufrió hasta el último duelo ante Bosnia, pero acabó como líder de grupo.

Le salvó un penalti, que significó el definitivo empate a uno en el estadio de Francia en París y que mantuvo al equipo al frente de la clasificación con seis triunfos, tres empates y una sola derrota, en la primera jornada por 0-1 contra Bielorrusia (0-1), un encuentro que desató las dudas en el nuevo proyecto.

Ha ganado en optimismo. Las primeras jornadas del torneo le han dado un lugar entre los ocho candidatos al trono continental, aunque hoy perdió con Suecia con goles de Zlatan Ibrahimovic y Sebastian Larsson.

Y eso que tiene argumentos de sobra sobre el terreno de juego para pensar en nuevos éxitos, futbolistas de un nivel altísimo, desde la habilidad, la técnica y el desborde de Franck Ribery hasta la calidad ofensiva del madridista Karim Benzema, pasando por medios centros de la talla de Samir Nasri y Yann M'Vila.

El valencianista Adil Rami, una de las grandes sensaciones defensivas en esta temporada de la Liga española, o el lateral del Manchester United Patrick Evra, además del portero Hugo Lloris, hablan del potencial de la retaguardia francesa, aunque hoy fue puesta en duda por Suecia.

Doble campeona de Europa, en 1984 en la final ganada frente a España, y ganadora del Mundial de 1998, se cruzará ahora en el camino de la selección dirigida por Vicente del Bosque.