El capitán de la selección española, Iker Casillas, se ha acercado a la escuela de fútbol de la localidad polaca de Gniewino, donde la 'Roja' se encuentra preparando sus partidos de la fase de grupos de la Eurocopa de Polonia y Ucrania, para fotografiarse con las decenas de niños y niñas que vieron cumplido el sueño de inmortalizarse con uno de sus ídolos.

Tras la sesión de entrenamiento dispuesta por Vicente del Bosque este miércoles, el guardameta madridista abandonó el complejo deportivo 'Mistral' para regresar al campo de entrenamiento de Gniewino. Una vez allí, el meta mostoleño recibió una bandera española de gran tamaño, además de una fotografía de grupo enmarcada. Casillas correspondió a estos detalles con la firma de autógrafos y con posados para los más pequeños.