Cada vez más gente realiza la declaración de la renta desde casa y a través de la red. Por eso, la Agencia Tributaria dedica mucho esfuerzo cada año para que se pueda llevar a cabo de forma cómoda, rápida y segura. Pero... ¿cómo evita esta institución que un 'black hacker' te ataque?

Un DNI electrónico -se puede pedir en cualquier oficina de expedición- o un certificado digital proporcionado por una entidad autorizada -Fábrica Nacional de Moneda y Timbre, Agencia Notarial de Certificación...- bastan para iniciar la declaración de la renta por internet.

Pero, ¿es realmente seguro este procedimiento?

El primer peligro es que alguien utilice técnicas de fuerza bruta para 'romper' la seguridad de tu certificado. Las claves que suelen emplearse son poco seguras -de 512 bits-, por lo que si un ciberdelincuente utiliza un programa para probar, de forma automática, miles de claves, al final, podría dar con las tuyas. Para evitarlo, entidades como la FNMT ya están comenzando a aumentar su longitud a 2.048 ó 4.096 bits.

El segundo riesgo es que un ciberdelincuente infecte el equipo donde tengas guardado el fichero con 'malware' y lo descargue. Además, con un keylogger -que permite saber al atacante qué escribes en el teclado-, podría conseguir la clave de exportación -la que debes introducir cuando importas el fichero al navegador-. Así, podría hacerse pasar por ti, realizar gestiones en tu nombre, comprar por internet, etc.

¿Qué es el certificado digital

El certificado digital de una persona física o jurídica le permite realizar trámites administrativos en la red, tener firma electrónica, reservar citas en organismos oficiales, acceder a documentación personal, cifrar datos...

Para obtenerlo, deberás realizar una solicitud desde tu ordenador y personarte en el lugar donde lo has pedido con tu DNI tradicional para que comprueben que tú eres quién realmente dices ser. Después, te enviarán por mail un enlace para que te descargues el certificado.