El MMT Seguros no pudo enderezar ayer su rumbo en la Liga Asobal y volvió a encajar una nueva derrota, esta vez en casa del Bada Huesca por 35-27.

El conjunto dirigido por García Valiente acusó en demasía el cansancio acumulado en este primer tramo de competición y, especialmente, el esfuerzo realizado para entrar en los octavos de final de Copa frente al BM La Roca y sucumbió ante un Bada Huesca que demostró tener el partido bien estudiado y no se dejó sorprender por el recién ascendido, que trató de luchar hasta el final.

El partido empezó igualado, con ambos equipos concentrados sobre la pista y con una defensa fuerte y pegajosa que no permitía al rival realizar lanzamientos con comodidad. Fue un inicio de partido tenso, donde Bada Huesca y MMT Seguros luchaban por imponer su ritmo y hacerse con el control del partido pero ninguno lo acababa de conseguir.

Así fueron transcurriendo los primeros minutos, con intercambios de goles en ambas porterías, y sin un claro dominador. Pero cuando el choque estaba a punto de alcanzar el minuto once, Savic detuvo el lanzamiento de Octavio y, a continuación, Reyes fue excluido. Una oportunidad que permitió al Bada Huesca abrir una ínfima brecha en el marcador (6-4). Dos minutos después, un tiro fuera de Jortos fue aprovechado por Huesca de poner más tierra de por medio en el electrónico gracias Escribano (8-5). Cada fallo de los visitantes tenía un alto coste.

A partir de ahí, el MMT Seguros empezó a jugar algo más precipitado y no fue capaz de recortar distancias en el marcador, ni tan siquiera cuando estuvo con superioridad numérica sobre la pista, manteniéndose siempre la ventaja oscense entre los tres y cuatro goles. Ni los tiempos muertos de García Valiente ni las rotaciones de banquillo lograron dar al cuadro de Viriato el empuje y las soluciones necesarias para meterse en un encuentro antes de un descanso al que se llegó con 17-13 en el marcador .

Pero el MMT Seguros es un equipo que ha demostrado en este incio de temporada que sabe sufrir y que no se rinde nunca. Por ello, tras el paso por vestuarios, el cuadro zamorano regresó a la pista con la convicción de que podía remontar y con un gran despliegue físico y buenas defensas fueron poco a poco ahogando el ataque local. Hasta que, con un parcial de 0-3, ponían el empate a 19 en el marcador. Tanteo que obligó en el minuto 35 a Nolasco a pedir un tiempo muerto para intentar cortar el juego zamorano. Y lo consiguió. Una jugada de estrategia en la siguiente acción rompió la sequía goleadora de un Bada Huesca al que catapultó en el luminoso su meta Pablo Hernández con dos paradas consecutivas. El golpe de efecto lo culminó Escribano, tras un robo de balón y contragolpe (22-19).

A partir de ese momento, el Bada Huesca fue creciendo y sintiéndose cada vez más cómodo mientras que el MMT Seguros, que empezaba a acusar de manera visible el cansancio, iba bajando su intensidad defensiva y producción ofensiva.

Exhaustos, a los zamoranos el partido se les convirtió en un autétnico calvario. Bada Huesca tiraba de recursos y ampliaba distancias en el marcador paulatinamente hasta asegurasre la victoria. Triunfo certificado antes de llegar a los cinco minutos finales, lcuando los locales llegaron a poner los diez goles de diferencia en el marcador (33-23).

A partir de ahí, el Bada Huesca se relajó un poco y permitió al MMT Seguros maquillar un marcador que acabaría con el 35-27 final. Un tanteo engañoso pues, la diferencia entre ambos equipos, no pareció tan abultada hasta que las fuerzas abandonaron al plantel de Viriato.