Que "nadie es profeta en su tierra" ha cobrado todo su sentido en las elecciones generales del domingo si se valoran los resultados obtenidos en la mayoría de los históricos feudos socialistas en los comicios municipales. O se puede interpretar lo contrario, que para los ayuntamientos "se vota a la persona". Los resultados electorales revelan que secular dominio del PP en el medio rural zamorano se transformó el 26-J en una auténtica apisonadora de la que salieron indemnes diez municipios, contados dedos de la mano.

En Molacillos, Pías, Pobladura de Valderaduey, San Miguel de la Ribera, Santa Croya de Tera, La Torre del Valle, Vallesa de la Guareña, Castrillo, Villabuena del Puente y Torres del Carrizal los socialistas lograron superar a los populares; apenas un cinco por ciento de una geografía provincial absolutamente teñida de azul.

No pueden decir lo mismo bastiones municipales socialistas, cuyos alcaldes han visto cómo su partido quedaba por debajo del PP. Es el caso de Puebla de Sanabria, donde el senador electo y alcalde José Fernández ha visto cómo los populares conseguían 373 votos (300 en 2015) frente a los 235 del PSOE (dos más que en los anteriores comicios).

También ha ganado el partido de Mariano Rajoy en Lubián (otro de los feudos socialistas en las municipales), Fariza (donde la distancia entre los dos grandes partidos se ha agrandado con una diferencia de 128 votos del PP sobre el PSOE) o Castroverde de Campos, donde el histórico Cecilio Lera vuelve a ver cómo su victoria municipal no se traslada en las elecciones generales. Lo mismo se puede decir de Morales de Toro, donde los populares superan a los socialistas en seis puntos, algo que no ocurre en las municipales donde el PSOE siempre ha tenido asegurada la victoria.

El Almeida de Sayago tampoco la victoria aplastante del socialista Miguel Alejo tiene que ver con las preferencias de los vecinos con el gobierno de la nación (183 del PP con diez más que hace medio año frente a 94 del PSOE, seis menos).

Se dan también casos paradójicos en esta interpretación de los datos electorales como el de Fuentelapeña, donde pese a que los socialistas no fueron capaces de sacar ni un solo concejal en las elecciones municipales, sin embargo existe una base de votantes afines al PSOE como lo demuestran los 176 votos conseguidos frente a los 229 del PP.

Carbajales de Alba es otro de los ejemplos donde el partido gobernante -en este caso Ciudadanos- está a años luz de los votos obtenidos por los populares (183 votos de éstos frente a los 17 conseguidos por la formación naranja).