"Con esperanza". Así afronta Braulio Llamero, candidato de Podemos al Congreso por Zamora, la cita electoral del domingo. "Si salgo elegido, seré el diputado de los zamoranos", asegura.

-¿Qué razones hay para apoyar su candidatura?

-No me gusta dar una recomendación directa, lo que quiero es trasladar una idea para que la gente piense y decida libremente qué le conviene al país. El domingo vamos a tener unas elecciones diferentes, se abrirá una nueva fase en el país, se trazará un rumbo que marcará el devenir de los próximos años. Los electores deben plantearse si les convienen las políticas que se han llevado a cabo hasta ahora, que económicamente siempre han favorecido a los de arriba, o quieren un cambio.

-Podemos incide mucho en la viabilidad de sus medidas económicas. ¿De dónde saldría el dinero?

-Está en el programa, somos la única formación que ha presentado memoria económica y jurídica. Para financiar la renta garantizada de 600 euros y el complemento salarial para que nadie cobre menos de 900, más la subida del salario mínimo, serían necesarios 25.000 millones anuales. Lo sacaremos de un ataque decidido al fraude fiscal y de algunos nuevos impuestos precisamente para los que no pagan. Planteamos un impuesto solidario a la banca que ha sido rescatada que se pagaría durante esta legislatura.

-No hablan de bajar impuestos.

-No, porque no hay margen al menos en primera instancia. Nos parece un cachondeo que los que han dejado el país en el estado en el que está hablen ahora de bajar impuestos. Es impresentable.

-¿Qué ganarían los zamoranos si Podemos llega al Gobierno?

-No es que ganen, es que Zamora está perdida si no triunfan las políticas que defiende Podemos. Cuando hablamos de ayudar a los de abajo no nos referimos solo a personas, también hablamos de territorios. Ahora se están practicando políticas que vacían la provincia y es necesario un cambio radical de modelo en el que lo pequeño sea valioso.

En el caso de Zamora tendríamos que ir al campo. Tenemos que recuperar el concepto de soberanía alimentaria, producir lo necesario para sobrevivir con lo que tienes y vender el excedente. Queremos que los agricultores sean el centro de la actividad, no a través de "limosnas" como la PAC y sí pagándoles lo que realmente vale su producto.

-Hay partidos que hablan de regular precios. ¿Van ustedes por ahí?

-No. Hay que reformar el sistema de ayudas de la PAC para que cobren quienes realmente trabajan el campo, sembrar lo necesario y no productos que no conocemos porque dan subvenciones.

-¿Qué proponen con respecto a las diputaciones?

-Vamos hacia su extinción paulatina. No hablamos de suprimirlas como hace Ciudadanos, porque es un brindis al sol. Ahora no se pueden suprimir porque primero habría que cambiar la Constitución. Queremos vaciarlas poco a poco de competencias y dárselas a los ayuntamientos para que sean más fuertes. Y las competencias que se queden grandes para los ayuntamientos las asumirían las comunidades autónomas.

¿Lamenta no haber podido pactar con IU?

Al final la confluencia se hará por abajo, los propios electores la harán. Puede ser que en provincias como Zamora se noten más los efectos de no ir juntos, pero pedimos a los electores que elijan cuál es el voto útil en esta ocasión.