El PSOE presume de tener, no un catálogo de propuestas, sino el proyecto, desde la moderación y la centralidad, con el que liderar "un gran acuerdo de cambio y modernización del país con la ciudadanía". César Luena, número dos del PSOE, que recaló ayer en Benavente en el inicio de campaña de las elecciones generales, declara que "el gran enemigo de los socialistas no es Podemos, sino la desigualdad abonada por el PP".

-Prometen empleo, crecimiento económico, blindar el Estado del Bienestar?, ¿realmente la crisis permitirá cumplir?

-Un matiz importante, los socialistas no prometemos, no ofrecemos, como el resto de partidos, un catálogo de ideas y propuestas, planteamos un proyecto de fondo, ambicioso, real y realista, de transformación, modernización y regeneración del país. Lo hicimos en los años ochenta, cuando modernizamos España; después, de nuevo en el Gobierno, cuando creamos un país de derechos. Y lo haremos ahora, con Pedro Sánchez como presidente, creando un país de oportunidades. Sabemos hacerlo.

-El PP les supera en intención de voto y si no logra la mayoría y Ciudadanos pacta finalmente, será gobierno, ¿qué perderán los españoles?

-No ocurrirá. El PSOE va a ganar las elecciones y Pedro Sánchez va a liderar el próximo Gobierno. Los españoles no quieren perder el futuro, un futuro de oportunidades para la mayoría. Basta repasar estos cuatro años, cerrar los ojos, y pensar en otros cuatro años de derechas en el poder.

-Pedro Sánchez ya ha tendido la mano a Ciudadanos, Podemos y otros partidos para liderar un programa en común, ¿será posible que se entiendan?

-El PSOE tiene una larga trayectoria de diálogo y entendimiento. Es el único partido situado en un punto de centralidad y moderación que le permite hablar de tú a tú, primero a la ciudadanía, y luego, al resto de fuerzas. Nuestro acuerdo es con los ciudadanos, eso vamos a alcanzar el próximo 20 de diciembre. Un gran acuerdo de cambio y modernización de nuestro país con la ciudadanía.

-Afirman que el PSOE es el único partido que puede aglutinar a la izquierda para formar un gobierno, ¿Podemos sigue siendo su gran enemigo?

-El gran enemigo de los socialistas es la desigualdad abonada por el PP, lo demás son adversarios. La fuerza de los hechos ha situado al PSOE donde está y a Podemos muy por debajo de donde decía estar. Nos planteamos una campaña en positivo, hablando a los ciudadanos y pensando en ellos, no en otros partidos políticos.

-¿Por qué habría que confiar precisamente en el PSOE?

-Sólo los socialistas podemos, queremos y sabemos aprovechar la incipiente recuperación para convertirla en una recuperación justa que llegue a todos, y no sólo a unos pocos, con buenos empleos, con derechos y salarios dignos. Y con unos servicios públicos de calidad y garantizados. No es que nos comprometamos a hacerlo, es que lo hacemos allí donde ya estamos gobernando: ayuntamientos o comunidades autónomas.

-La corrupción política es una de las principales preocupaciones de los ciudadanos, ¿cómo se ha llegado a esta situación?

-Es una preocupación lógica y legítima que compartimos. Muchos factores explican esta percepción: hay quien ha burlado a la justicia y se ha reído de ella, que es reírse de todos, escamoteándole datos y reventando a martillazos el ordenador de su contable. Hay un partido que se ha instalado desde hace 20 años en un sistema perverso e irregular de cuentas opacas, pensando que no pasaba nada y que quien hace la ley hace la trampa. Las leyes las hacemos todos, las hace el Parlamento, y las trampas las hacen fundamentalmente algunos. Es inaceptable.

-¿Cómo atajarla?

-La política tiene que recuperar ejemplaridad. Pedro Sánchez es un político limpio y el proyecto de Gobierno del PSOE tiene la regeneración y la limpieza como uno de sus tres grandes pilares, junto a la creación de empleo y la recuperación de los servicios públicos. Hemos demostrado con hechos un nivel de tolerancia cero con cualquier abuso.

-¿Qué medidas concretas?

-El PSOE va a devolver la confianza a los ciudadanos en sus instituciones, desde la ejemplaridad, en primera persona, abordando cuestiones como la representación política, el régimen de funcionamiento de los partidos, la mejora de la calidad de las instituciones, la regulación de los organismos supervisores y reguladores, o la regulación de órganos constitucionales. Es un amplísimo proyecto, transversal, para blindar a la vida pública frente a la corrupción. Sólo el PSOE puede hacerlo, no la derecha, que, si es incapaces de regenerarse a sí mismas, mal regenerará su país.

-El ciudadano tiene la sensación de que de repente los partidos parece que han descubierto que la "calle" existe. ¿Tan alejados estaban?

-El PSOE siempre ha estado en la calle, es calle, somos ciudadanos y ciudadanas con un compromiso público. Sí había alejamiento, desafección, de la ciudadanía hacia la realidad política, y es legítima. Por eso hacemos de la ejemplaridad, de la limpieza, de la transparencia elementos clave en nuestro proyecto de Gobierno, para devolver a la ciudadanía la confianza en sus instituciones.

-El PSOE promete ser el cambio tranquilo, ¿qué quieren decir con ese mensaje?

-Hay quien llama cambio a la ruptura, y hay quien llama cambio al inmovilismo o a la derecha vestida de seda. Sólo hay un cambio real, que es el cambio transformador, el cambio posible y sin estridencias, con solvencia, desde la experiencia. Ese es el cambio que lidera Pedro Sánchez, el cambio que representa el PSOE.

-Sánchez apela al voto útil. Se presentan como el único partido que puede aglutinar a la izquierda para gobernar, ¿temen un nuevo castigo?

-Los ciudadanos nos enfrentamos el 20 de diciembre a una pregunta básica: decidir si queremos seguir con un modelo que defiende únicamente los privilegios del 10% de los ciudadanos, frente a otro que persigue el interés de la mayoría. El modelo de los recortes, frente al de la justicia social. El modelo de las desigualdades, frente al de las oportunidades. Apostar por el modelo de la corrupción estructural o el de la tolerancia cero con todo lo que no sea política limpia: optar, en definitiva, por el modelo del PP o del PSOE. Sólo el PSOE puede impedir que gobierne Rajoy.

-¿Cómo les convencería para que retornaran el voto al socialismo?

-Nos jugamos el futuro de nuestro país y el PSOE representa las reformas, frente al inmovilismo de unos y el rupturismo de otros, por tanto, hay una decisión clave: Pedro Sánchez o Mariano Rajoy. Esto es lo que vamos a decidir en el 20D porque sólo el PSOE puede ganar al PP. La mayoría de los españoles desea un cambio a la izquierda, sólo el PSOE puede traer el que quiere la mayoría y poner en marcha un gobierno para esa mayoría.