El presidente del Gobierno en funciones y candidato del PP a la investidura, Mariano Rajoy, se ha mostrado dispuesto este lunes a gobernar en minoría, únicamente con el apoyo de los 137 escaños logrados por su partido en las elecciones generales, pero ha reclamado "responsabilidad" al PSOE y a Ciudadanos para que ese ejecutivo sea duradero apoyando los presupuestos o el techo de gasto, entre otras cosas.

Rajoy ha vuelto a insistir hoy en la necesidad de que se forme cuanto antes un gobierno y ha apelado a la responsabilidad de todos los partidos para que eso sea posible, porque según ha asegurado "no es el PP el que tiene urgencia en gobernar, es España la que necesita urgentemente un gobierno". En su discurso ante la Junta Directiva Nacional del PP, Rajoy ha asegurado estar dispuesto a gobernar en solitario si es necesario.

Ha prometido no obstante que, toda vez que el PSOE se sigue negando a su apuesta primera, la de la gran coalición, trabajará por hacer posible la que es, en su opinión, "la segunda mejor opción", un gobierno con "amplia base parlamentaria".

"Nosotros asumiremos nuestra responsabilidad, pero los demás también tienen votos y escaños y la obligación moral y democrática de asumir la suya", ha proclamado Rajoy.

Y ha advertido, ante las negociaciones para la investidura, de que "no hay excusa posible para que no haya un acuerdo" que permita la formación de un gobierno.

Rajoy ha lanzado este aviso en la víspera de las sesiones constitutivas del Congreso y el Senado de la XII legislatura. Precisamente, ha sido en este discurso en el que ha propuesto a Ana Pastor para presidir el Congreso de los Diputados y ha anunciado que Pío García Escudero seguirá al frente del Senado.

El presidente del Gobierno en funciones ha dedicado buena parte de su intervención a enviar a los demás partidos ese mensaje de la responsabilidad compartida para formar gobierno y, sobre todo, para evitar que haya unas terceras elecciones.

Ha asegurado que los españoles no querían tras los comicios del 20 de diciembre, "ni mucho menos ahora" tras las elecciones del 26 de junio, que "se juegue a la ingobernabilidad de España".

Por eso ha prometido que las negociaciones que va a encabezar para su investidura serán muy distintas a lo que se vivió tras las anteriores elecciones.

Así, ha considerado que los ciudadanos han valorado con sus votos "la seriedad" mostrada por su partido de no participar en "estériles ceremonias de confusión" de actuar "sin engañar a nadie" y de huir de la "política espectáculo". Y del mismo modo, ha prometido, actuará ahora el PP en esta nueva fase de negociaciones.

"Se necesita seriedad, responsabilidad y sentido común, tenemos que estar pendiente de las cosas que importan y no solo de las frases ocurrentes, el PP va a seguir siendo serio, ordenado, responsable y moderado", ha asegurado Rajoy ante este proceso.

Ha dicho incluso que la corta legislatura anterior -que acabó sin investidura- debe ser "el mejor antídoto" para que "nunca más se repita" lo visto esos seis meses.

A juicio de Rajoy ya no hay "excusa posible" para que no haya acuerdo: "No la hay porque no se le puede hacer esto a los españoles que tienen derecho a que haya pronto un gobierno en España", ha apostillado.

Ha asumido el líder del PP que la "mayor responsabilidad" para intentar formar gobierno la tienen él y su partido. Pero también ha advertido de que "hay unos mínimos donde los demás también tendrían que asumir su responsabilidad", y tienen la "obligación moral y democrática" de hacerlo.

Mariano Rajoy ha defendido el documento que su partido ha entregado a la negociación, y ha asegurado que no ha pedido la "adhesión incondicional de nadie" a estas propuestas.

Es un "punto de partida para hablar, escuchar otras propuestas y definir un ámbito en el cual nos podamos sentir cómodos nosotros y nuestros eventuales socios", ha asegurado Rajoy.

El líder del PP ha recordado una vez más las urgentes decisiones que tiene que tomar el nuevo gobierno, la primera de ellas, la aprobación del techo de gasto con el que se elaboran no solo los presupuestos del Estado, sino también los autonómicos y municipales.

Y ha recordado que el Consejo de Ministros tiene que aprobar el proyecto de ley de presupuestos el 23 de septiembre -para que entren en el Congreso antes de que acabe ese mes como marca la ley-, además de subrayar otras medidas como el nuevo sistema de financiación autonómica.