El candidato del PSOE a la Presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, ha afirmado que el próximo 26 de junio se celebran unas elecciones que son "el plebiscito del cambio", para el que "sólo hay un camino que lo garantiza", que es el PSOE. Así, ha manifestado que "el cambio no tiene intermediario".

En un mitin celebrado en Jerez de la Frontera (Cádiz), Sánchez ha vuelto a apelar para ese cambio a "los socialistas de corazón", afirmando que "necesitamos que salgan", porque "merece la pena ir a votar porque hay argumentos para votar sí al cambio".

"Sabemos que el socialismo es lucha, no resignación, y España os necesita", ha afirmado Pedro Sánchez, que ha explicado a sus militantes que el próximo 26 de junio se va a decidir "si hay cambio o no, si va a haber políticas socialistas y demócratas y quién va a ser el presidente del gobierno".

El candidato socialista se ha mostrado "convencido" de que puede llegar a la Moncloa porque va a ser "la primera fuerza política si no se queda nadie --del PSOE-- en casa".

Así, ha señalado que actualmente "hay muchas cosas que hacer por el país" y ha recordado los cambios que gobiernos socialistas han realizado en España a lo largo de la historia, como la sanidad y la educación pública y gratuita o el sistema de pensiones no contributivas. Así, ha apelado a que ahora, igualmente, hay "muchas cosas" que cambiar, como que la sanidad sea "universal y gratuita" o que "no haya aforados y Rita Barberá sea juzgada como todo hijo de vecino".

Pedro Sánchez, después de ser rechazado por dos veces en los debates de investidura, se ha mostrado convencido de que "a la tercera va la vencida".

Sin alusiones a Ciudadanos

Asimismo, ha advertido de que el 26 de junio se celebran "nuevas elecciones, ni una repetición como dice Mariano Rajoy ni una segunda vuelta como dice Pablo Iglesias". Y a su juicio, son "nuevas elecciones, porque a ojos de los españoles, yo no somos iguales", porque "saben quien ha trabajado y saben quién es de izquierda".

El candidato socialista ha insistido en que el 26 de junio firmará un contrato por cuatro años con los españoles pero con revisión, ya que a los dos años se someterá a una moción de confianza.

Asimismo, en cuanto a referencias a los demás partidos políticos, Pedro Sánchez no ha hecho ninguna referencia a Ciudadanos, se ha referido a Pablo Iglesias para recordarle a sus militantes que es el de "la izquierda que quiere vigilar" a los policías y las televisiones o el que "la misma noche de las elecciones dijo que quería repetirla, a los dos días que quería cuatro grupos parlamentarios y al día siguiente decía que sí pero con ministerios sociales como el CNI".

Así, la mayoría de las referencias realizadas a otros partidos han ido centradas al PP, "porque en estos cuatro años hemos sufrido un mal gobierno" y se han servido de "excusas para recortar derechos".

Sánchez, tras reafirmar que "evidentemente no queremos a Rajoy cuatro años más, porque todo lo tiene en B", ha ido desgranando a la militancia presente en el acto el programa de gobierno que quiere llevar a cabo una vez que gane las elecciones y sea presidente del Gobierno.

En este sentido, además de la derogación de la reforma laboral, "por no compartir ni sus objetivos ni sus instrumentos", y porque quiere que España "sea más competitiva haciendo las cosas mejor y no más baratas", Sánchez ha hecho referencia también a la "apuesta" que va hacer el PSOE por la Educación, por la Igualdad, por las pensiones y por la clase media, a la que han dejado de pertenecer, según ha dicho, tres millones y medio de españoles.