Representantes de los grupos parlamentarios intentan acordar una reducción de los gastos electorales para los nuevos comicios generales del próximo 26 de junio. De momento, solo se han puesto de acuerdo en reducir la publicidad exterior.

UPN calcula que los nuevos comicios a poco más de seis meses del 20D exigirían un sobreesfuerzo a las arcas públicas de 150 millones de euros.

Conscientes de la demanda social de una campaña barata que traslade a los ciudadanos el mensaje de que no son ellos los que sufragan la incapacidad de los partidos para formar gobierno, las principales fuerzas políticas acuden al encuentro con voluntad de acuerdo.

Para el PP, la "línea roja" es el 'mailing' o buzoneo de papeletas, que en su opinión es imprescindible que se mantenga, según ha avanzado su portavoz, Rafael Hernando.

La propuesta de los 'populares' es la eliminación de la publicidad exterior y de toda la cartelería, así como el recorte de un 30 por ciento del presupuesto de cada partido, siempre y cuando se lo apliquen todos.

El PSOE está de acuerdo en esos dos puntos, incluso se ha comprometido a reducir su presupuesto un 30 por ciento independientemente de que haya acuerdo, mientras que Podemos plantea fijar un tope de gasto de 3 millones de euros por partido y Ciudadanos, recortar un 50 por ciento el límite de gasto.

Mantenimiento del 'mailing'

Fuentes socialistas aseguran que ningún partido gasta el límite electoral y sostienen que la verdadera reducción cuantificable es la de suprimir la publicidad exterior: carteles, banderolas o vallas, como ya hicieron en las europeas de hace dos años.

Su argumento es que el principal objetivo de esta publicidad es dar a conocer a los candidatos y difundir que va a haber elecciones, y ambas cosas son ya conocidas por los españoles.

El PSOE, al igual que el PP, quiere mantener el 'mailing', pero renegociando con distribuidores, imprentas y proveedores para abaratarlo desde los actuales 0,22 euros por elector a 0,15.

Para Podemos y Ciudadanos, sin embargo, sería suficiente con un único envío a los electores que incluya todas las papeletas, una "cesta de Navidad", que rechaza el PP.

El partido de Albert Rivera planteará además en la reunión de hoy potenciar en esta campaña los debates electorales, mientras que Podemos propondrá el límite máximo de 3 millones de euros por partido, lo que supondría un ahorro de 47 millones de euros, según su portavoz parlamentario, Íñigo Errejón.

La primera formación que propuso recortar los gastos de la campaña fue UPN, que planteó una rebaja del 30 por ciento, una iniciativa que vio con buenos ojos el Rey durante la última ronda de contactos para la investidura antes de la disolución de las Cortes y la convocatoria electoral.