El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha dicho este viernes que ve al líder socialista, Pedro Sánchez, "capaz" de buscar una coalición de "ocho o nueve partidos", algunos con planteamientos independentistas, y ha advertido de que ésa no sería la opción más conveniente para España.

Rajoy ha acudido hoy al Congreso para acreditarse como diputado, y ha vuelto a insistir en su propuesta de un gran pacto entre PP, PSOE y Ciudadanos, con el que se formaría, ha dicho, un "grupo fuerte de 250 diputados" que podría llevar adelante las reformas y que "transmitiría fuera y dentro España un mensaje de tranquilidad, estabilidad, seguridad y certidumbre".

Ha admitido no obstante, en declaraciones a los periodistas, que no ve disponibilidad alguna por parte de Sánchez para dialogar con él, y que el líder socialista ha dejado claro que no propiciará un gobierno del PP.

El jefe del Ejecutivo en funciones ha insistido en cualquier caso en que seguirá defendiendo su propuesta hasta que consiga llevarla a cabo. "En el supuesto de que lo logre", ha admitido.

Y ha explicado que no ha podido hacer hasta ahora ninguna oferta concreta a Sánchez "porque no ha querido escucharla", pero en cualquier caso la trasladará en el debate de investidura.

Hasta entonces, ha apuntado que se trata de ir teniendo "conversaciones discretas" para ver la disponibilidad de cada uno, aunque ha admitido que ya conoce la del líder socialista, que ya ha dicho que en ningún caso va a favorecer un gobierno del PP. "Su disponibilidad es evidente", ha ironizado.

En este sentido ha lamentado que haya "gente" que "que no ha querido ni hablar" en este proceso, pero espera que en el futuro estén más dispuestos a "escuchar, dialogar y contrastar pareceres". "Yo por mi parte lo voy a intentar", ha añadido.

Mariano Rajoy no ha querido dar detalles de las conversaciones que pueda estar manteniendo con otras fuerzas políticas. Éste es, ha explicado, un proceso constante de diálogo que tiene que continuar pero para el que "no hay unas reglas cerradas".

Y ha reiterado que sólo hay tres opciones: el pacto que él plantea, una coalición de "extrema izquierda" que incluya a independentistas y partidarios del derecho de autodeterminación o volver a celebrar unas elecciones generales.

La "mejor" de las opciones, ha subrayado, es la suya, porque lo que necesita el país es "estabilidad, certidumbre, seguridad, consolidar la recuperación económica" y seguir en la senda de crecimiento económico "fuerte" y de "creación de empleo". "Tenemos por delante cuatro años que pueden ser decisivos", ha dicho.

Además ha vuelto a señalar que si se produce una coalición de los partidos de izquierda sería la primera vez en la historia de la democracia que el partido que gana las elecciones generales no gobernara.