La Comisión Europea (CE) "tomó nota" este lunes de la decisión del gobierno estadounidense de prorrogar un mes la exención de tarifas a las importaciones europeas de acero y el aluminio y advirtió de que la Unión Europea "no negociará bajo amenaza".

"La decisión de EEUU prolonga la incertidumbre de los mercados, que ya está afectando a las decisiones de las empresas", criticó el Ejecutivo comunitario en un comunicado.

La CE indicó en ese contexto que los Veintiocho deberían disfrutar de una exención "plena y permanente" ya que las medidas que la administración estadounidense amenaza con aplicar "no pueden estar justificadas sobre la base de la identidad nacional".

En ese contexto, la Comisión recordó que "el exceso de capacidad en los sectores del acero y el aluminio no se origina en la UE", sino que "por el contrario, la UE se ha comprometido en los últimos meses a todos los niveles posibles con EEUU y otros socios para encontrar una solución en este asunto".

Bruselas subrayó asimismo que la Unión ha indicado "de manera continuada" su voluntad de abordar todos los temas sobre el actual acceso a los mercados de interés para ambas partes, pero ha dejado también claro que, como socio y amigo de Estados Unidos, "no negociará bajo amenaza".

"Cualquier futuro programa de trabajo transatlántico tiene que ser equilibrado y mutuamente beneficioso", añadió.

El Ejecutivo comunitario indicó que la comisaria europea de Comercio, Cecilia Malmstrom, ha estado en contacto en las últimas semanas con el secretario de Comercio estadounidense, Wilbur Ross, y con el representante comercial de EE.UU., Robert Lighthizer, y que esos contactos "continuarán".

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump pospuso el lunes un mes la imposición de aranceles al acero y al aluminio a los países de la Unión Europea, México y Canadá; unas tarifas de las que eximió indefinidamente a Argentina, Brasil y Australia, según anunció la Casa Blanca.

Los polémicos aranceles del 25 % al acero y del 10 % al aluminio entraron en vigor el 23 de marzo pasado, pero Trump eximió temporalmente a algunos de sus principales aliados para negociar acuerdos comerciales paralelos para lograr una reducción en las importaciones de esos productos.