El paro subió en 29.400 personas en el primer trimestre del año, lo que supone un 0,8% más que en el trimestre anterior, hasta situarse el total de desempleados en 3.796.100 personas, según la Encuesta de Población Activa (EPA) publicada este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

La tasa de paro se incrementó dos décimas en el primer trimestre, hasta el 16,74%, mientras que la tasa de actividad bajó tres décimas, hasta el 58,46%, tras reducirse el número de activos en 94.700 personas entre enero y marzo (-0,4%), su mayor descenso en un primer trimestre desde el ejercicio 2015.

La subida del desempleo registrada en el primer trimestre es la más elevada para este periodo desde el año 2013, cuando el desempleo subió en más de 257.200 personas. En los primeros trimestres de 2016 y 2017 se registraron incrementos del desempleo de 11.900 y 17.200 personas, respectivamente, mientras que en 2014 y 2015 hubo descensos de 2.300 y 13.100 parados.

Entre enero y marzo de este año se destruyeron 124.100 empleos, un 0,6% respecto al trimestre anterior, lo que situó el total de ocupados en 18.874.200 personas. Este recorte de puestos de trabajo es el más elevado en un primer trimestre desde 2014, cuando desaparecieron 184.600 empleos.

No obstante, en términos desestacionalizados, la ocupación registró un aumento del 0,46% respecto al trimestre anterior, mientras que el desempleo se redujo un 2,97%.

En el último año, el paro acumula un descenso de 458.900 desempleados, lo que supone un 10,8% menos que en el primer trimestre de 2017. En cuanto a la ocupación, se han creado 435.900 puestos de trabajo en los últimos doce meses, a un ritmo interanual del 2,36%.

Se destruye solo empleo privado

La destrucción de empleo registrada en los tres primeros meses del año se concentró en el sector privado, que perdió 155.200 empleos (-1%), ya que el sector público generó 31.000 puestos de trabajo, un 1% más respecto al trimestre anterior. En el último año se han creado 304.000 empleos en el sector privado (+2%) y 131.900 en el público (+4,4%).

En el primer trimestre se destruyeron 90.300 puestos de trabajo ocupados por españoles (-0,5%) y 33.900 empleos ocupados por extranjeros (-1,6%).

Por su parte, el número de activos se redujo en 94.700 personas hasta marzo, un 0,4% respecto al trimestre anterior, con lo que la población activa en España quedó constituida por 22.670.300 personas, de las que 18,8 millones estaban ocupadas y casi 3,8 millones en paro.

En el último año, el volumen de activos ha disminuido en 23.000 personas (-0,1%), situándose la tasa de actividad en el 58,46%, tres décimas menos que en el último trimestre de 2017.

El paro masculino sube el doble que el femenino

Entre enero y marzo, el paro masculino subió el doble que el femenino, con 20.100 varones más en paro (+1,1%), frente a un incremento de 9.300 mujeres desempleadas (+0,5%). Con estos datos, tanto la tasa de paro masculina como la femenina repuntaron dos décimas, hasta el 15,18% y el 18,54%, respectivamente.

Desagregando los datos por nacionalidades, el paro de los españoles aumentó en el primer trimestre en 13.900 personas (+0,4%), en tanto que los extranjeros en situación de desempleo subieron en 15.500 (+2,3%). La tasa de paro de los españoles se situó así en el 15,7%, una décima más que en el trimestre anterior, mientras que la de los extranjeros aumentó siete décimas, hasta rozar el 24,3%.

Al contrario de lo ocurrido con el desempleo, la destrucción de empleo registrada en el primer trimestre fue mayor entre las mujeres. Así, mientras que los hombres perdieron 55.200 puestos de trabajo entre enero y marzo (-0,5%), la ocupación femenina se redujo en 69.000 personas (-0,8%).

La caída de la actividad se dejó sentir también algo más entre las mujeres. Al finalizar marzo, había 59.600 mujeres menos que en el trimestre anterior en disposición de trabajar (-0,5%), con lo que la tasa de actividad femenina se situó en el 52,9%, casi cuatro décimas menos que en el trimestre anterior. Entre los hombres, la actividad bajó en 35.100 personas en los tres primeros meses, un 0,3%, hasta situarse su tasa en el 64,3%, casi tres décimas menos que a cierre de 2017.

Por sectores, el desempleo sólo bajó entre los parados de larga duración (más de un año en el paro) y en el colectivo de quienes buscan su primer empleo. En concreto, el paro de larga duración se redujo en 37.400 personas respecto al trimestre anterior (-2,3%), en tanto que los que buscan su primer empleo recortaron su número de parados en 46.900 personas (-11,7%).

En sentido contrario, donde más subió el paro en valores absolutos fue en los servicios, con 91.300 parados más que en el trimestre anterior (+7,4%), seguido de la industria, con 8.600 parados más (+4,9%); de la agricultura, que sumó 7.600 desempleados (+3,8%), y de la construcción, con 6.300 parados más (+4,2%).

Por su parte, la destrucción de empleo en el primer trimestre afectó a los servicios y a la industria. El mayor recorte se lo anotaron los servicios, que perdieron 110.500 puestos de trabajo hasta marzo (-0,7%), mientras que la industria destruyó 34.900 ocupaciones (-1,3%). Por el contrario, la agricultura generó 13.100 empleos en el trimestre (+1,6%) y la construcción creó 8.200 puestos de trabajo (+0,7%).

Se destruye más empleo temporal que fijo

En el primer trimestre, el número de asalariados bajó en 130.300 personas (-0,8%) tras reducirse los asalariados con contrato indefinido en 1.400 personas (-0,01%) y disminuir los temporales en 128.900 personas (-3%). La tasa de temporalidad retrocedió así seis décimas, hasta el 26,1%. En el último año los asalariados fijos han aumentado en 278.500 (+2,4%) y los temporales en 173.000 (+4,4%).

Todo el empleo destruido en el primer trimestre fue a tiempo completo (-133.100), un 0,8% menos, frente a la creación de 8.900 empleos a tiempo parcial (+0,3%). Por su parte, los trabajadores por cuenta propia aumentaron hasta marzo en 5.900 personas (+0,2%), lo que situó el número total de autónomos en 3.075.800 personas.

El paro sube en 12 comunidades

En el primer trimestre el paro subió en doce comunidades autónomas, especialmente en Baleares, con un aumento del 37,29 por ciento respecto al trimestre anterior. También aumentó considerablemente en avarra, con un incremento del 8,92 por ciento y Murcia, donde crece el 7,47 por ciento.

Además, el desempleo también creció en Extremadura (3,69 por ciento), Castilla-La Mancha (3,16 por ciento), Asturias (2,95 por ciento), Galicia (2,41), País Vasco (1,72), Andalucía (1,58), Aragón (1,23), Castilla y León (0,91) y Comunidad Valenciana (0,73).

También subió de forma importante en las ciudades autónomas de Ceuta (25,57 por ciento) y Melilla, el 11,06 por ciento.

Por contra el paro bajó en cinco comunidades: Cantabria (9,46 por ciento), Canarias (7,32 por ciento), La Rioja (4,91), Cataluña (4,29) y Madrid (2,22 por ciento de parados menos).

En términos absolutos, el paro subió más en Baleares (28.000 personas) mientras que bajo de forma significativa en Cataluña, con 20.600 desempleados menos y Canarias donde el paro retrocedió en 18.000 personas.

Respecto a la tasa de paro, Extremadura registra la más alta (25,94 por ciento) por delante de Andalucía (24,74), Castilla-La Mancha (20,68) y Canarias (20,62).

En relación al mismo trimestre de 2017, el paro descendió en 14 comunidades, especialmente en Cataluña (con una bajada superior al 20 por ciento), Canarias y La Rioja mientras que subió en Asturias, Baleares y Navarra.

La tasa de paro juvenil baja hasta el 36,3%

El número de jóvenes en paro menores de 25 años bajó en 42.900 personas en el primer trimestre del año, un 7,6% respecto al trimestre anterior, situándose la cifra total de jóvenes en situación de desempleo en 515.200 al finalizar marzo.

La tasa de paro juvenil se situó así en el 36,3% a cierre del primer trimestre, tasa 1,1 puntos inferior a la del trimestre anterior (37,4%) y algo más de cinco puntos por debajo de la de hace un año (41,6%).

Por su parte, el número de activos menores de 25 años se redujo en 72.000 personas en el primer trimestre (-4,8%), según datos extraídos de la Encuesta de Población Activa (EPA) que elabora el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Entre enero y marzo, el paro bajó tanto entre los jóvenes de 20 a 24 años (-35.600 desempleados), como entre los de 16 a 19 años (-7.300), con caídas porcentuales del 8,5% y del 5,2%, respectivamente.

En el resto de franjas de edad se registraron ascensos del desempleo. Así, el paro subió en 51.600 personas (+1,9%) entre las personas de 25 a 54 años y en 20.700 personas entre los de 55 y más años (+3,9%).