Mañana, por primera vez, grandes comercios como El Corte Inglés y las tiendas del grupo Inditex rompen su tradición de comenzar las rebajas el 1 de julio, plegándose así a los descuentos que muchas tiendas llevan a cabo sin fechas concretas y para que no coincidiese en fin de semana.

"Las aglomeraciones en la puerta de unos grandes almacenes el día 1 de julio, esperando la gente a que abriesen, se ha acabado", afirma a Efe Gustavo Samayoa, presidente de la Federación de Usuarios Consumidores Independientes (FUCI).

"Los consumidores compran escalonado y de acuerdo a sus necesidades y en todos los sitios, incluso en las tiendas de su barrio si ponen descuentos", destaca Samayoa, quien cree que los grandes grupos "ahora se han plegado y han dicho: nosotros también".

Similar opinión expresa el portavoz de CECU (Confederación de Consumidores y Usuarios), David Hurtado, pues recuerda que la principal novedad este verano es que la gran superficie que marcó en su época el inicio de las rebajas -El Corte Inglés- "rompe su tradición".

Considera que el adelanto de fechas puede ser "el principio del fin de un sistema de rebajas que, a pesar de que ya la oficialidad no lo marcaba así, se mantenía en unas fechas concretas".

Hurtado piensa que, a partir de ahora, "se mantendrá de forma mucho más flexible un periodo de verano y otro invierno", y durante el año "se salpicarán periodos de rebajas" o habrá "cuatro grandes periodos coincidiendo con las distintas estaciones".

El portavoz de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), Enrique García, asegura que desde la liberalización de las rebajas hace unos años se ha ido flexibilizando la fecha tradicional de rebajas; "antes la ley hablaba de dos periodos (7 de enero y 1 de junio) y eso ya ha desaparecido".

Este verano las rebajas se adelantan, además, en viernes, "un día de mucho tirón comercial", argumenta García, que recuerda: "a mayor tiempo de rebajas los consumidores se beneficiarán más de los descuentos". Actuar con cabeza, comparar precios antes de decidirse y no dejarse llevar por mensajes de publicidad confusas y engañosas o por el "3x2" si no se necesitan tantas cosas son algunas de las recomendaciones de todas las asociaciones de consumidores.

'Precios gancho'

Así, la OCU aconseja hacer un presupuesto y ver cuáles son las necesidades reales. "Al final pueden salir caras las rebajas si los consumidores se dejan llevar por el entorno, la publicidad y unos precios gancho y compran algo que en verdad no necesitan", avisa Enrique García.

"El comprador debe ser razonable, consumir lo que debe consumir, no llenarse de cosas que luego no le sirven para nada y que se adapte a su presupuesto", aconseja FUCI.

"Las rebajas no son sinónimo de pérdida de calidad, el consumidor tiene los mimos derechos y las mismas obligaciones", es decir, el mismo sistema de pago que en periodo normal y la misma política de devolución del dinero si en periodo normal lo anuncia, recuerda Gustavo Samayoa.

Desde CECU recalcan que es un buen momento para aprovechar y comprar productos que necesitemos con un buen descuento, pero haciéndolo "con una cierta racionalidad".